EL TIEMPO SIEMPRE DA LA RAZON

Leo con atención el artículo de Marcos Sanchidrián sobre la venta de la Ganadería de Fernando Domecq “Zalduendo” al empresario mexicano Alberto Bailleres.

Llevo mucho tiempo luchando con algunos de los conceptos a los que hace referencia Fernando Domecq, por ese motivo; no me extraña ninguno de ellos, pero una vez más haremos defensa de lo que estimo oportuno sobre los mismos, veamos:

.- Ha sido un conjunto de faltas de respeto hacia la figura del ganadero. Por ejemplo, en los últimos años se han multiplicado los burladeros pero todavía no existe uno exclusivo para los ganaderos.

Sobre este particular podemos ver especialmente en algunas plazas, ejemplo de ello es la de Úbeda, que en las reformas llevadas a cabo en la misma, las correspondientes a la ampliación de burladeros en el callejón y que las presentara quien fuera un buen delegado de la autoridad -claro que la alegría dura poco en casa del pobre, dice el refrán- es evidente que posteriormente a la renuncia de tal cometido -algo evidente en este tipo de personas y; lo digo en todo el buen sentido de la frase- también ha servido la susodicha ampliación para colocar en los mismo a individuos que no tienen nada que ver con el festejo; señoras tanto del Delegado de la Autoridad como del Presidente del festejo, invitados mil que nada tienen que ver directamente con el espectáculo, esto por poner solo un ejemplo y no alargarme en la lista de “invitados de boda” son un claro ejemplo de ello.

Me pregunto para cuando las competencias plenas del Ministerio de Cultura y tras la ocupación como mucho de un burladero por agentes de los C.C. y F.F. de Seguridad del Estado, el resto ocupe su puesto bajo los arcos de los vomitorios, lugar donde verdaderamente se acude con rapidez en caso -algo muy poco probable- de alteración de orden público, generalmente ocasionado por las negligentes decisiones de un presidente incompetente ¿Para qué queremos tanta Fuerza en un callejón si no se dan cuenta de haber puertas abiertas mientras se ejecuta la Suerte de Varas? 

 ¡Y eso que la tiene justo detrás!

Dice el artículo 23. Funciones de la Delegación de la Autoridad. En su punto 1 apartado b, lo siguiente:

b) Ejercer la máxima autoridad en el callejón de la plaza, apoyado por sus auxiliares. A tal fin, con la colaboración activa de los alguacilillos y del personal empleado de la empresa, controlará la idoneidad de las instalaciones, el acceso y ocupación de los burladeros, previa expedición de los correspondientes pases de acceso al callejón de la plaza de toros, debiendo ordenar el abandono del mismo a aquellas personas que se encuentren consumiendo en éste bebidas alcohólicas, no contaran con la preceptiva autorización para su permanencia en aquél o no ocuparen sus lugares en el burladero del callejón que les correspondiese durante el desarrollo del espectáculo o sean ajenas al mismo.

 ¿Ven ustedes la separación entre callejón y tendido?
El burladero en primer térmmino es el designado para el delegado de al Autoridad ¿Quienes son los invitados?

Para estos si, pero...........¿Para qué entonces un burladero para ganaderos? ¿Qué pintan estos en un festejo taurino?

El artículo 54. Suerte de varas en su punto 9 dice: Los monosabios se consideran auxiliares del picador y, a estos efectos, podrán ir provistos de una vara o fusta para el desempeño de su labor. A tal fin, a los monosabios les estará prohibido:

b) Sobrepasar la situación del estribo izquierdo del picador actuante.

d) Agarrar a los caballos por los bocados durante la ejecución de la suerte de varas, salvo peligro inminente para el picador.

Esto paso en Úbeda en el año 2011precisamente por estar el monosabio sujetando del bocado el caballo mientras Padilla caricaturizaba la bonita y respetable Suerte de Varas ¿Esto no se controla? ¿No se denuncia?

 El monosabio bajo el de Cebada Gago

.- Otro señor decidió subir la altura de las tablas pero nadie pensó que la función de las tablas es la de tomar el olivo en momentos de riesgo, lo que ha provocado situaciones de mucho riesgo.

Sobre este punto da que pensar, dar lo mismo si un profesional pueda o no saltar dicha barrera en un momento de apuro durante la lidia, al/los legisladores de este “maravilloso” reglamento que es el andaluz, parece preocuparle como vemos en el punto anterior que a quien más haya que proteger es a la infinidad de “invitados de piedra” que existen dentro del callejón de la plaza fuera de los burladeros, incluidos los propios delegados de la……………. “autoridad” que deambulan entre lidia y lidia de cada toro como si estuvieran en el patio de su casa..

.- Además, ya el ganadero es el último incluso en los reconocimientos de los toros por parte de los veterinarios, todo este desorden me ha hecho decir: hasta aquí hemos llegado, afirma Fernando Domecq.

.- Ya son 40 años en la primera línea y no puedo tolerar una absoluta falta de respeto desde que llegas a una plaza. Antes el ganadero era el todo, ahora es el último hasta en los reconocimientos.

Esto ocurre por muchos motivos, pero el principal es por la prepotencia de muchos de los intervinientes en las tareas previas a la celebración del festejo que creen saber y conocer al toro más que los propios ganaderos o mayorales que están al cargo de las reses. El toro llega a la plaza y ya parece haber perdido todo hilo directo con el ganadero a no ser para sacarle faltas mil, dándose la circunstancia que de todas esas mil faltas, ninguna, absolutamente ninguna -salvo raras excepciones- nos encontramos la del afeitado de los mismos ¡Qué casualidad que toros totalmente desmochados no hayan sido propuestos para análisis de las astas!

 Algunos de los bellos ejemplares autorizados para su lidia por el presidente de la Plaza de Toros de Ubeda

Con esa intachable presentación no es de extrañar la cara de satisfacción de los aficionados, muchos de ellos totalmente ausentes de lo que ocurre en le ruedo

 .- ¿Existen los recipientes obligados para tal efecto en plazas de 3ª categoría?
.- ¿Porqué no se pone la copia del acta de reconocimiento que exige el vigente reglamento en lugar del panfleto del orden de lidia, que a saber que lumbreras ha inventado y, lo que es peor, autorizado tan ridículo papelote?

 Esta si es el Acta de Reconocimiento

Y este el panfleto nulo y sin ningun valor que se autoriza porque lo anterior no tiene copias siuficientes.

Sergún me informa un Presidente con mayúsculas trae tres copias, Presidente, Delegación y Veterinario y no hay ninguna para exponer al público como ordena el reglamento. No interesará el aficionado.

.- ¿Dejan verdaderamente a los señores veterinarios actuar con plena libertad o están limitados por la Administración?

.- ¿Para cuándo una verdadera escuela de presidentes para aunar tomas de decisiones en festejos taurinos y poder “limpiar la era” de tanto incompetente nombrado a dedo por el político de turno dependiendo de la amistad con el mismo?

.- ¿Para cuándo la labor burocrática para personas realmente preparadas que dependan directamente del Ministerio de Cultura?

De muchas otras cuestiones podríamos seguir hablando pero lo dejaremos en este punto, no alargando más un tema que poco a poco habrá que hacer que una verdadera autoridad ponga coto a tanto incompetente.

Como siempre en estos casos acabo con una frase del insigne Presidente de Las Ventas, el cual dijo en cierta ocasión: ¿Dónde está la Autoridad? ¿Autoridad? ni está, ni se le espera y; yo añado, si verdaderamente la hubiera y hubiera del mismo modo la dignidad y vergüenza que debiera, nada de lo narrado y fotografiado debiera de ocurrir.

 No discutiré el motivo de la expulsión de este expectador por obviedad, pero si diré algo; viendo las fotos anteriores habría que preguntarse: ¿Y al guarda, quien lo guarda? ¿Quien le obliga a cumplir con su obligación? Está claro....... La Autoridad.

Esto es ni más y menos otro nuevo motivo para como llevan tiempo conmigo, sigan negándome el pase de callejón, el acceso al sorteo de las reses para tomar nota del orden de lidia de profesionales, dar quejas al director del periodico donde colaboro siendo este Blog muy personal, que ya hay que ser .............. para llegar a eso; pero que todo el mundo sepa qué seguiré compartiendo felizmente tendido con los verdaderos aficionados, como hacía Joaquín Vidal -con todo mi respeto al maestro- y en la lucha de la defensa del TORO y del AFICIONADO por encima de toda pasada de mano por el lomo a nadie, mucho menos a ineptos y desconocedores de la Fiesta en general, para todos ellos, banderillas negras. ¡Ahora vas y lo cascas!