Esta semana conocimos la ganadería de reses bravas
jienense “Venta La Mejora”, en la Finca “Los Cuarterones” propiedad de los
hermanos Juan Carlos y Antonio Martín Campos.
Dos ganaderos que continuando con la pasión por la
cría del toro bravo inculcada por su padre D. Juan Andrés Martín Alcaide, hacen
una selección estricta llevando el perfecto seguimiento de su árbol genealógico
ganadero y conseguir un encaste propio con las características que su
personalidad les lleven a dar a ese toro que con tanto amor crían.
Se tentaron unas becerras y un par de bonitos
novillos, un jabonero y un castaño de bonitas hechuras, el cual ha resultado
bravo tanto en el caballo como en la muleta.
Los toreros invitados fueron el Matador de Toros
Juan Antonio Millán “Carnicerito de Úbeda” y el novillero valenciano Jesús
Chover, el cual hace el paseíllo en esta próxima Feria de Fallas el día 11 de
marzo junto a Varea y Andy Younes para lidiar reses de D. Antonio López Gibaja.
¿Asombrado? por supuesto que no, todo el que me
conoce sabe que si dijera haber quedado impresionado con lo que vi y escuché de
boca de alguno de los presentes incluido el propio señor ganadero, sabe
perfectamente que le mentiría. Que satisfacción produce escuchar que hay quien
acude al tentadero por tener la satisfacción de ver torear al maestro de Úbeda.
Que satisfacción produce escuchar al señor ganadero decir que siempre es un
placer llamar a este torero por las formas adoptadas en una plaza de tientas,
sabiendo claramente diferenciar lo que es el toreo campero hecho para que el
ganadero vea las condiciones de sus reses a las que hay que adoptar en una
plaza de toros cualquier tarde de festejo. Que satisfacción produce escuchar al
señor ganadero dirigirse al maestro de Úbeda y decirle que a él no hace falta
decirle como son los tentaderos en su casa, debido a lo dicho en el punto
anterior.
Que satisfacción produce ser el socio que como
Presidente representa una Peña Taurina con el nombre de “Carnicerito de Úbeda;
pero a la vez que desazón produce que un torero con estas condiciones se vea
olvidado por las empresas, eso es lo que no puede entender ningún aficionado
que conoce al maestro de Úbeda.
Buena tarde de toreo de parte de Juan Antonio Millán
que en más de una ocasión los ¡oles! del propio ganadero en el silencio del
momento impregnaban la tarde con esa magia que solo se consigue cuando un
torero abandona su cuerpo para trasmitir esas inexplicables sensaciones a todos
los presentes, algo que solo puede producirse en el toreo.
El novillero Jesús Chover también tuvo del mismo
modo ponerse a punto ante el próximo compromiso que tiene anunciado en su Feria
de Valencia, un novilleo al que vi suelto, con ganas y resolutivo en todo
momento ante la cara de las reses que tentó.
También tuvieron su momento de gloria “El Dani”
quien fuera novillero de Motilla del Palancar.
Así como Ramón, el grandísimo
aficionado de Albacete que muleta en mano y gorrilla ajustada como los
maletillas de antaño, pudo dar unos muletazos de bonito trazo.
De parte de los señores ganaderos que decir, Antonio
Martín Campos quien junto a su hermano Juan Carlos ocupa las tareas de mayoral
y picador tanto en sus tentaderos como en algún que otro festejo en plazas de
toros, estuvo sensacional; aquí podemos ver a Antonio citar como mandan los
cánones, como se ha citado de toda la vida de Dios a un toro desde el caballo
para echarla vara por delante y ponerla en el sitio, sujetando a la res sin
dejar que se estrelle contra el peto de esa “mole” que hoy se utiliza y que en
tiempos anteriores se denominaba caballo de picar. Extraordinario Antonio, el
cual me hizo vivir y sentir momentos los cuales llevaba años sin experimentar,
parecerá extraño pero pude sentir como la sangre fluía en mi interior de forma
distinta.
He querido dejar a Juan Carlos Martín Campos para el
final porque como “director de lidia” en el tentadero, sus decisiones tomadas
en cada momento, la buena armonía desde el lugar ocupado por él y el caballo
que montaba su hermano Antonio, la lidia de parte de los toreros en los
terrenos que iba marcando en cada momento hicieron toda una clase pedagógica
entre los aficionados que allí nos encontrábamos, algo muy importante al menos
para el que les escribe, ya que considero el tentadero como una de las tareas
camperas más importantes en una casa ganadera. Estas y otras sabias decisiones
contadas por este joven ganadero de Santa Elena como la importancia de la vaca
en la cría y selección del ganado bravo fueron momentos que en mi opinión se
debieran hacer públicos en coloquios y conferencias para que el nuevo
aficionado aprenda realmente lo que es la Fiesta de Toros, que todo no se basa
en el colorido y ambiente de una tarde de toros, que detrás de todo eso hay
unos hombres que son los que realmente hacen posible que los toreros nos
deleiten en una tarde de corrida. Pero sobre todo que sean honrados hombres
trabajadores del campo bravo, hombres que luchan por conseguir ese difícil
sueño que resulta conseguir y valga la redundancia, el toro de sus sueños.
Gracias amigos, gracias porque como aficionado tanto
a los toros como a practicar el toreo cuando tengo la mínima oportunidad,
habéis conseguido que pase una tarde que jamás olvidaré y por supuesto en mí
quedarán para siempre las lecciones aprendidas.