No cabe duda que el Círculo Taurino de Baeza marca diferencias dentro de lo que son las entidades taurómacas, no solo en la provincia de Jaén sino en el panorama taurino nacional.
El pasado día nueve durante uno de los actos de concordia que marcan esta emblemática entidad como son las comidas de socios que celebran todos los martes del año en el Palacio Fortaleza D. López Sánchez Valenzuela, sede de la misma; se hizo entrega a los socios D. Manuel López Martínez y D. Antonio Fernández Sáez de la “Medalla de Plata del Círculo Taurino de Baeza”, dando justo reconocimiento como portadores de los valores que ejercen con su pertenencia a esta entidad taurina así como sus altísimas virtudes y cualidades demostradas, tanto personales como profesionales, de las que derivan tan noble ejemplaridad para el estamento taurino y la sociedad en general.
Otro de los galardones que esta entidad taurina otorga como es el “Trofeo al triunfador de la Feria” recayó en esta edición de 2010 en el diestro Antonio Ferrera, quien compartió cartel el día grande de feria con Luís Bolívar e Iván Fandiño ante toros de la legendaria ganadería de D. Victorino Martín Andrés.
Sus dos completas faenas y el juego de sus oponentes hicieron que Antonio Ferrera diera una gran tarde de toros. Si bien estuvo en su primero, tanto el púbico asistente al festejo como al propio torero le será difícil olvidar a su segundo toro, al que le cortó el rabo y las mulillas pasearan por el ruedo. Desde su encuentro con el capote mostró el “albaserrada” sus nobles credenciales para que el extremeño lo lanceara cuantas veces quiso, y con la muleta se rebosara con él desplegando toda su tauromaquia, con temple, entrega, variedad y alegría conectada a los tendidos.
De la entrega del preciado galardón que esta entidad tiene constituido se dará la información oportuna tanto del lugar y fecha de su celebración al aficionado interesado en asistir al acto.
Pero no acaban aquí los actos que el Círculo Taurino de Baeza tiene programados este año, sino que otro digno de mención por su gran calidad y categoría se está preparando, se trata de un homenaje al empresario portugués Rui Bento Vásquez. Un empresario emprendedor y que ha apostado por la Plaza de Toros de Campo Pequenho de Lisboa, una de las plazas más bellas del mundo que se está rehabilitando actualmente. El último espectáculo taurino que se dio en la plaza fue el 13 de julio de 2000, con toros de Paulo Caetano para los rejoneadores Paulo Caetano, Rui Fernandes y Joao Moura Caetano. La Casa Pía, propietaria de Campo Pequenho, la arrendó por 99 años a la familia Borges, que está acometiendo las grandes obras de remodelación antes de su reinauguración.
Un gran ejemplo de taurinismo el portugués, país vecino, olvidado y apenas considerado que ha levantado en poco tiempo un importante pilar, recuperando y superando el recuerdo de la vieja Campo Pequenho, majestuoso edificio neomorisco, que en la actualidad es mucho más que una plaza de toros ya que ha sido convertida en un moderno complejo de ocio, no siendo óbice para que como es de lógica la Fiesta de los Toros asuma el papel protagonista por excelencia. La Plaza de Toros no ha perdido su carácter de estilo románico, que recuerda al visitante otras épocas, su parte alta es de estilo bizantino y la inferior de estilo árabe. La aventura iniciada hace cinco años por el emprendedor portugués Rui Bento Vásquez, ex matador y apoderado, le ha dado la razón antes incluso de lo que él mismo pudiera pensar teniendo en cuenta que se trataba de reactivar una afición que llevaba seis largos años hibernando a consecuencia del cierre del antiguo coso.
Las instalaciones actuales incluyen una fantástica sala de espectáculos con capacidad para diez mil personas y en el nivel subterráneo, circundando la plaza, una amplia galería comercial con 60 tiendas, restaurantes y bares, un supermercado, 8 salas de cine y estacionamiento con capacidad para 1250 vehículos. La importante escalera al frente del edificio da acceso a la Galería Comercial.
Pocas plazas, por no decir ninguna, pueden presumir de haber registrado en una temporada como ésta una ocupación media del 85% en sus tendidos: Ha sido un año muy positivo, dice el propio Rui Bento, además de haber conseguido colgar el cartel de “no hay billetes” hasta en cinco corridas.
Las casualidades o los golpes de suerte no son habituales y las claves del éxito las cimenta el empresario en un trabajo a medio-largo plazo con sus frutos a la vista. Pero el ejemplo lisboeta no se ciñe únicamente al éxito en taquilla, ya que abarca otros triunfos mediáticos y sociales en los que los toreros, ganaderos y empresarios españoles andan ahora ocupados en recuperar.
Como siempre ha sido habitual, a buen seguro serán unos actos donde el aficionado baezano y todo aquel que se acerque de los alrededores disfrutará de un ambiente especial y acogedor como el que dispensa esta entidad baezana de tanto prestigio como el su Círculo Taurino. Enhorabuena a todos sus componentes.