Jaén
es rico en encastes ganaderos. Cuando se habla de encastes tenemos que tener en
cuenta que existen un gran número de ellos, que todos los toros no son iguales
o sea que hay distintos tipos, anatomía y morfología; y tienen del mismo modo distinto
comportamiento frente al caballo, capote y muleta.
Los
diferentes encastes que he podido torear en los distintos tentaderos, han
imprimido ese carácter que aunque en líneas generales tengan comportamientos
comunes con reses del mismo encante, siempre cambian dependiendo del carácter singular
que le imprime cada ganadero.
De
todo lo dicho, aquí os dejo una serie de novillos y becerras de distintos
tentaderos donde vemos palpablemente lo que refiero en los párrafos anteriores.
El
novillo de D. Iñigo Garzón, procedencia Núñez del Cuvillo. Reses que pastan en la Finca Cerropelado, término municipal de Guarromán.
El maestro Frascuelo en Cerropelado
Un novilllo indultado por Adrián de Torres
El
novillo de D. Francisco Sorando ganadería que pasta en la Finca “Pedro Bagar”
en la Sierra de Andujar está formada con reses de encaste Luís Gamero Cívico, Carlos
Núñez (derivado del Parladé) y Teófilo Segura, prevaleciendo el encaste Domecq.
El novillero Manuel Bautista en Pedro Bagar
Un noble y bravo novillo de Sorando
Reses de D. Juan Pablo Jiménez Pasquau, reses de encaste Domecq que pastan en la Finca Los Cuellos, término de Baños de la Encina; es el encaste más común, el que
más prevalece en la cabaña brava española, un toro con aspecto aleonado, bajo
de cuartos traseros, fino de piel y buenas defensas.
Miguel Tendero en Los Cuellos
Rematando una serie
Esta
otra becerra salió extraordinaria, pertenece a la vacada de Los Rodeos, reses
que pastan en el término municipal de Guarromán, propiedad de D. Antonio
Torres. Es de encaste Ibarra, prevaleciendo mucho las reses coloradas, ojo de
perdiz y de unos pitones acaramelados.
Otra de las becerras que he toreado con una clase extraordinaria, se arrancó de lejos cuantas veces se citó.
El torero linarense Antonio José Lorite
Una brava becerra
Aquí
tenemos una vaca de los Hermanos Flores Albarrán, una vacada que se cría en la
Finca Cabezaparda, en la Sierra de Andújar. Este encaste es
característico por sus capas cárdenas y negras, tiene defensas muy desarrolladas
y una cabeza y morrillo peculiares, llamadas reses con cara de “hocico de rata”.
Este
es un encaste que tiene muy desarrollados sus sentidos, hay que hacerle muy bien
las cosas desde un principio y sobre todo estar muy firme con ellas.
Personalmente, toreando esta utrera de bella estampa y trapío, pasé mucho
miedo, el que más en mi vida; pero gracias a los consejos que me venían desde
el burladero donde se encontraba el maestro “Carnicerito de Úbeda”, donde el
secreto estaba en tener una buena colocación, una justa medida de la distancia
a la hora del cite y sobre todo quedarse muy quieto a la hora del embroque y
correrle la mano con templanza hasta el final, puedo asegurar que es tal su nobleza
y humillación en las embestidas; que una vez rematada la tanda, ha sido con uno
de los encastes que más a gusto e importante me he encontrado.
Carnicerito de Ubeda en un extraordinario natural
Derechazo a una Santacoloma
Puedo
decir que por lo general, que aun siendo de distintos encastes las reses que aquí
vemos, puede observarse que la nobleza es un concepto fundamental en todas
ellas, de lo contrario un aficionado sería incapaz de sacar un muletazo
medianamente correcto como es el caso.
Como
siempre he dicho Jaén es una tierra rica en ganaderías y encastes, los tiene de
todo tipo y es un lujo poder ver estos toros en el campo y observar características:
Tipos, pelos, encornaduras y sobre todo el comportamiento que tienen en la
plaza cuando se acude a algún tentadero.
¡Aficionado a los toros, visita Jaén! te llevarás un grato recuerdo.