martes, 30 de septiembre de 2014

A QUIENES UN DÍA

Oculto en el fondo de un cajón, la alianza consagrada por quienes conmocionaron y agitaron nuestras devotas entrañas.

Posiblemente nos acusen tiernamente de déspotas bribones, románticos shakesperianos ibéricos que, descarados exhiben pancartas en vez de calaveras. Al alimón cuerdos y locos del TORO...
Gentes osadas cual Romeo con agallas capaz de despachar a por amapolas a una Julieta si la dama sólo muestra dar cobijo en su alcoba a "garcillos" o cuvigrandes".

Quizás nuestra sea la inmoral moralidad de no aspirar a sentirse atado a profeta alguno; si acaso a ese indomable espíritu que, en una tarde nos coja del brazo invitándonos a "meter el dedo en la llaga", para seguir creyendo en el exultante milagro del toreo.

Negaste nuestros sacrificios en forma de trémulas noches de hotel, de suspiro y vigilia, vísperas de cárdenos, cebadas y tríos triguereños.
Rechazaste con desdén las caricias del amante que espera, envuelta en negro satén y ungiste en incienso la definitiva extrema unción a la torería.
Te convertiste en infiel señoritingo con estoque de carbono y toro de velcro. Acarreándonos a desterrar a tanta figura, maldiciendo cada paso, cada trápala, cada truco...

Recibe pues mi sentida despedida, más no destierres al olvido nuestro alma de bolero, pues sin saber por qué, seguimos esperando al revolucionario que, muleta en la izquierda, espada en la derecha y corazón en el medio vuelva a dar sentido aquello de "Si tu me dicen "Ven", lo dejo todo".
Fuente.- Gloria Cantero. Colaboradora de la Región de Murcia para De Catafalco y Oro.

FRANCISCO JOSE ESPADAS EN ARNEDO

Hoy torea en Arnedo (La Rioja), el novillero Francisco José Espadas.
Tuve la ocasión de compartir capa en un tentadero junto a el y su mentor César Jiménez. Desde este Blog le deseo toda la suerte del mundo y que consiga el preciado trofeo que en esta bonita localidad riojana se pone en lid.





lunes, 29 de septiembre de 2014

UBEDA NECESITA DE CARNICERITO CARNICERITO NECESITA DE UBEDA

Hoy nos despertamos con titulares como “Polémica suspensión en Ubeda” en la Revista Taurina “Aplausos”, en donde se dice:
La lluvia caída esta mañana, motivo oficial de la cancelación de un festejo que congregó muy poco público en los tendidos. José Carlos Venegas y el presidente, en contra de la empresa y los otros cinco toreros.
La localidad jienense de Úbeda ha suspendido la corrida concurso de ganaderías que iba a celebrarse este domingo y en la que iban a tomar parte seis matadores para lidiar toros de El Ventorrillo y Guadalmena. El festejo, cuyos beneficios iban destinados a ayudar en la lucha contra el cáncer, contaba con la participación de Javier Castaño, Juan Luis Pizarro -que se despedía de los ruedos-, Rubén Pinar, David Valiente, Alberto Lamelas y José Carlos Venegas.
La lluvia caída en las últimas horas ha sido el motivo oficial por el que se ha cancelado el festejo, si bien es cierto que el ruedo estaba en perfectas condiciones y que a la hora del inicio del espectáculo no llovía y tampoco había previsión de que fuera a hacerlo durante la tarde. La escasa afluencia de público podría haber influido en la decisión final de la suspensión. De los seis toreros, todos menos José Carlos Venegas estaban de acuerdo junto a la empresa en cancelar el festejo. Sin embargo, el presidente de la función y el torero de Beas de Segura se han postulado en contra, llegando incluso a pedir el diestro en la reunión entre las partes que él estaba dispuesto a matar los seis toros en solitario, algo que era inviable según el reglamento. El propio Venegas ha afirmado con contundencia que la suspensión no tenía sentido y que le parecía una falta de respeto hacia los pocos aficionados que se acercaron al coso jienense. Por otro lado, Alberto Lamelas ha asegurado en declaraciones a APLAUSOS que si ha decidido no torear ha sido, únicamente, porque la empresa no le aseguraba que fuera a cobrar los honorarios estipulados para poder pagar a su cuadrilla.

Según la Peña del torero de Cortijos Nuevos, Alberto Lamelas declaró sentirse triste por no haber podido torear en Ubeda, pero creo que hay que dignificar esta profesión por encima de todo, y si queremos que la fiesta continúe tenemos que aprender a hacernos respetar, por eso cada uno escoge su manera de andar el camino y el mío es defendiendo mis intereses profesionales económicos y los de mi gente, esa que cada tarde se juega la vida conmigo. Puedo asegurar que no es fácil decir que no una tarde, tal y como están las cosas hoy en día, pero hay que aprender a defender la integridad y la honra de toda la gente que vive de esto, NO TODO VALE.

En declaraciones para el medio de información que represento -Úbeda-Baeza Comarcal- el propio empresario Juan Collado declara que los motivos de la suspensión fueron dos:
.- En primer lugar no estar de acuerdo en no poder ayudar a la A.E.C.C., entidad para la cual iban destinados los beneficios de esta corrida, dada la poca afluencia de público.
.- Y en segundo lugar, no engañar a un público que ha sacado una entrada y dadas las circunstancias de la inestabilidad de la tarde, arriesgarse a hacer el paseíllo y tener que suspender antes de finalizado el festejo, conllevando por consiguiente la no devolución de la entrada.
Dos razones, creo que lo suficientemente comprensibles ya que con tan escaso público, no puede nadie hacerse cargo de los pagos correspondientes.

Poca afluencia de público que en mi opinión han sido por varios motivos. En esta Feria comenzaron los mentideros taurinos a anunciar una corrida de toros compuesta por Enrique Ponce, “Carnicerito de Ubeda” -al cual la afición de Úbeda tiene ganas de ver- y un tercer torero de cabeza del escalafón, sonando nombres como Talavante, Perera……..

Si a esto le sumamos que a los pocos días se anuncia una corrida de toros benéfica que mucho público incluso ayer mismo entrando a la plaza, preguntaba el porqué del traje de luces en lugar de vestir de campero si se trataba de un festival; y lo peor de todo, el día tan inestable que hizo con una lluvia pertinaz por la mañana, nublado por la tarde y con lluvia intermitente, todo ello ha podido ser el detonante de esa poca afluencia de público al Coso de San Nicasio.

En fin, que por unas razones o por otras, un año más, la Feria Taurina de Ubeda sufre otra suspensión donde todos hemos perdido, empresa, ganadero, toreros y público, algo que entre todos hay que solucionar llegando a un buen entendimiento para que la Feria Taurina de Ubeda en particular y la Fiesta de los Toros en general vuelva a brillar como se merece. No busquemos ningún "cabeza de turco", recapacitemos y verán que como dice el refrán "entre todos la matamos y ella solo se murió".

Si me quedo con unas sinceras palabras de una persona allegada a la empresa, cuyo nombre obviaré, el cual me dijo: “Ubeda necesita de “Carnicerito” y “Carnicerito necesita de Ubeda”, ha sido una pena que siendo el torero que es y el toreo que atesora, no se haya podido llegar a un acuerdo, aunque respeto la decisión tomada por el mismo. Señores, esto es algo que dice muy mucho de esta persona y del torero también, por supuesto.

El día de San Francisco estaremos nuevamente en el Coso de San Nicasio para informar de la novillada sin picadores que hay anunciada.








Al final, hubo consenso, empresa y cinco de los toreros
deciden que lo acertado es suspender.
No así el torero Venegas y un Presidente influenciado
por dos partes que en esto según el Reglamento, como suele decirse vulgarmente, "ni pinchan ni cortan".

Fotos: Jesús Delgado

CARTELES PARA ESTA SEMANA






sábado, 27 de septiembre de 2014

YA ESTAMOS EN OTOÑO. OTRA FORMA DE VIVIR EL TORO

En esta época otoñal el ambiente campero al igual que su entorno, cambia de color. Un ambiente cubierto de colores cálidos y tonos ocres, nos confieren un paisaje que aun careciendo de la luminosidad primaveral no deja de ser una delicia para los sentidos. Llegado este tiempo, los días se acortan siendo la luz más tenue, es cuando los árboles se desprenden de sus hojas cambiando su atuendo habitual disponiéndose para el duro invierno.

Paradójicamente el ganado bravo barrunta también la estación venidera e igualmente se prepara vistiendo un “abrigo” que aunque deslucido por su tosquedad y conocido en el argot taurino como “pelaje de invierno”, se desprenderá de él a la llegada de la primavera para volver a lucir esa piel fina, tersa y brillante que caracteriza a las reses de lidia. Mientras llega esa época y el tiempo vuelva a dar savia nueva y esplendor tanto al campo bravo con su olor a jara, tomillo o mejorana así como a las reses que en él pastan, aprovechamos estas agradables temperaturas otoñales para seguir disfrutando del toro bravo de una manera diferente.

Otoño, bonita y acogedora estación llena de tradiciones, por eso me encanta noviembre. Llegado este mes con el día de la festividad de Todos los Santos, en una gran casa taurina solemos reunirnos un nutrido número de amigos y aficionados teniendo la primera cita importante tras el cierre oficial pocos días atrás en Jaén de la temporada taurina española.

También podemos prescindir de nuestras tradiciones y “americanizarnos” aún más celebrando “Halloween” estando en casita viendo en televisión a la familia Simpson tomando unas “pop corn” como aperitivo, seguir con una gran serie yanqui cenando una calórica ensalada de maíz, pizza y si acaso algún hot-dogs pero sin kétchup, lo digo por aquello de la sangre, regado todo ello con un buen caldo de “cola light”.

La mañana no puede empezar mejor, un desayuno españolísimo y muy andaluz a base de migas aderezadas de ajos y pimientos fritos, chorizo y panceta; acompañadas de unas sardinas a la parrilla sobre leña de olivo, buen jamón, queso, pipirrana jienense, aperitivos varios y las primeras aceitunas aliñadas del terreno, regado todo ello con unos excelentes Vinos Finos y de Rioja contribuyen a tomar fuerzas para el plato fuerte del día. Cante flamenco en directo acompañado de “rebujito”, dan paso a una estupenda paella que tras dar buena cuenta de ella, es rematada con un aromático café de puchero con miel y unas gotas de orujo, así como unos dulces típicos.




Después llega el plato fuerte de la jornada en el intermedio del ágape para abrir boca de lo que sería el remate final. Unas lustrosas becerras esperan a que los más atrevidos puedan demostrar el “Arte de Cúchares” ante ellas.


Tras la fiesta campera, cuestión de los nervios probablemente, como por arte de magia se vuelve a abrir el estómago y avivamos nuevamente el fuego para continuar dando cuenta de las viandas derivadas del cerdo acompañando todo ello con música y baile. Y para rematar la jornada con una buena estocada en todo lo alto, sentados junto a una lumbre hasta bien avanzada la madrugada no falta la tertulia taurina en la que para dar la categoría que se merece el día, siempre nos acompaña un Matador de Toros. De esta manera tan “salvaje” trascurre anualmente la festividad del día de Todos los Santos para un buen grupo de amigos.










Lo narrado no es ni más ni menos que el acontecimiento celebrado un día del año por unas personas que formamos parte de esta “nueva España de las 17 tribus o 16 dependiendo de Cataluña” a los que algunos nos tildan de “anti-progresistas” o “asesinos y maltratadores”. Que acompañados de niños sacrificamos en este día, peces y cerdos y; no contentos con eso, “lastimamos” a unas pobres vacas bravas para divertimento colectivo, jactándonos además de que por encima de todo aún gustamos de nuestras tradiciones y su “anti producente” gastronomía, creemos en Dios y como si de otra religión se tratara adoramos al TORO, ¿pasa algo? ¡Viva el carácter español!, el auténtico, el genuino y, no el que muchos quieren implantar.


Seguramente moriré de un infarto y cargado de colesterol, pero moriré con mis tradiciones y mi fe, si ocurriera por estas fechas lo haría harto de “gachas, buñuelos, huesos de santo” y buen aguardiente y por encima de todo mi afición a los toros. No quiero ni espero ningún otro Mrs. Marshall.

Estas “bacanales” estarán conmigo si digo, que no son dignas de un pueblo civilizado, esas tradiciones y costumbres hay que “abortarlas” cuanto antes mejor, todo sea por el “progresismo”. Pero al igual que pasa cuando quieres dejar de fumar, cuesta y; como la carne es débil, no puedo resistirme a la tentación.


viernes, 26 de septiembre de 2014

Se cumplen 30 años de la cogida que paralizó a España

Toros

Así fue la cornada mortal de Paquirri


Feria de Pozoblanco. El reloj marcaba las siete y veinte de la tarde cuando sobrevino la trágica cogida. Ya han pasado 30 años. Corría el año 1984. Paquirri había saludado al cuarto toro de Sayalero y Bandrés con verónicas mirando al tendido. «Estuvo enorme», recordaba su banderillero Rafael Torres en el 25 aniversario (2009). Así lo narraba: «Mientras el caballo de picar se colocaba, se aguantó al toro en el burladero. Cuando se dirigió a Paquirri, se le cruzó. Y al siguiente lance se le venció por el izquierdo y le echó mano. Su instinto fue agarrarse a la cara y el pitón lo zarandeó durante mucho tiempo hasta penetrar en varias trayectorias. El toro no soltaba a Paco y el boquete era cada vez más gordo. Hasta que humilló y lo dejó». La sangre se despeñaba a borbotones por la taleguilla azul y oro entre las caras de horror del tendido.
El subalterno Rafael Corbelle, de la cuadrilla de El Soro -único superviviente del cartel maldito-, se arrancó el corbatín para que el hermano del torero le hiciese un torniquete en la pierna, que parecía haber recibido hachazos. «Que llamen al doctor Vila», se oyó. Cuando comenzó la intervención del cirujano Eliseo Morán, se oyó su voz entre el llanto: «Doctor, la cornada tiene al menos dos trayectorias, una p'acá y otra p'allá. Abra todo lo que tenga que abrir. Lo demás está en sus manos». Contaba en el 25 aniversario Corbelle que el médico, «con la tez blanca como el nácar, hizo todo lo que pudo». Y hablaba de las deficiencias de la enfermería: «Allí no había ni anestesia. Estaba llena de telarañas, muy sucia». Este percance fatal marcaría un antes y un después en la asistencia sanitaria en los cosos.

Agonía en la carretera

Buscaron la salvación en Córdoba tras la cornada de «Avispado». La ambulancia serpenteaba y el corazón del torero se paralizaba por segundos en la horrible agonía de una carretera angosta camino de Córdoba. A Francisco Rivera Pérez le faltaba el aire. «¿Cuánto queda?», preguntaba con un hilo de voz, que se apagó al llegar a la zona llamada La Alegría de la Sierra. El doctor Funes pidió al conductor que parase para inyectarle aliento. Nada se pudo hacer. Pasadas las nueve, con el quirófano del Hospital Militar ya preparado, la parca arrebataba al hombre y agigantaba la leyenda. «¡Se me ha muerto, se me ha muerto!», gritaba desconsolado su mozo de espadas, Ramón Alvarado.
Francisco Rivera nació torero y murió figura con solo 36 años. Perdió todo en el escenario donde todo lo ganó: el ruedo. Y se marchó en brazos de la noche más amarga.

jueves, 25 de septiembre de 2014

MI HOMENAJE A LOS MALETILLAS DE TERUEL



Personas desinteresadas que ayudaban dentro de sus posibilidades a los chavales también las había, románticos hasta tal extremo, que llegaban a empeñar su propio dinero formando empresa para montar algún que otro festival benéfico e incluso promocionar a algún torerillo en ciernes y a otros ya puestos en “circulación”. No puedo por menos llegado este punto que rendir un merecido homenaje al turolense Raimundo Navarrro y a su hermano Antonio, el cual llegó a alternar de novillero junto a “Tinín” y Paquirri el 29 de mayo de 1964. En una pequeña parcela situada en una zona llamada “El Pinar” a las afueras de la capital maña, se convertía en centro de reunión de muchos aficionados y que a la postre sería la primera “Escuela Taurina” de la ciudad de otros tantos que probaron suerte en tan difícil andadura, sin ayuda de las modernas “subvenciones”, palabra desconocida por entonces, con un capote y una muleta del desaparecido matador de toros valenciano Luís Millán “El Teruel” (que Dios tenga en su gloria), mas conocido por los amigos como “El Turronero”, por el trabajo ejercido por su madre en la venta de este producto para ganarse la vida, el tal Raimundo dedicaba el tiempo necesario con aquel que se presentara en su casa, dispuesto a practicar el “toreo de salón” y fortalecerse físicamente, de vez en cuando adquiría algunas becerras que tras ser toreadas varias veces se alquilaban para algún pueblo y con los beneficios poder de nuevo comprar alguna res “virgen”¡cuantos viajes harían los animales!, cuando oían el motor del camión, ponían las orejas de punta como diciendo “ya nos vamos de fiesta”, no necesitando manso que les arropara para subir y bajar del mismo, amén de recorrer muchos kilómetros en un “SEAT 124” por las distintas capeas de la provincia para que los chavales pudieran torear, sacrificando en la mayoría de las ocasiones su propia familia, desde aquí mención especial a Antoñita y sus hijos Rafa y Pili por ser los mayores en esa época, sin olvidar por supuesto a los dos pequeños, sin ellos seguro que muchos de los sueños de esos chavales no hubieran podido hacerse realidad.

No siempre era todo tan dulce como el poder saborear la suave embestida de una becerra, en ocasiones adquiría vacas de considerables encornaduras astifinas, por las que su entrañable esposa Antoñita le recriminaba constantemente de que aquello era demasiado para los pobres chiquillos. Alguna de ellas venía incluso preñada para poderle sacar el fruto que llevaba consigo, como el que dio la famosa vaca “madrileña”, que su destino final fue acabar embolada con fuego en un pueblo de la provincia, ¡Que bravura! ¡Que nobleza la de “Madrileña”!, hasta embolada a fuego y con la ofuscación en la vista que tal tradición les produce a las reses, embistió por derecho sobre el asfalto de una calle, sin caerse, sin resbalarse, mugiendo de brava y tragándose los pases de muleta de un valiente espontáneo, llegando este a quedar extenuado por el tiempo aguantado delante de ella y eso que en la finca de “El Pinar” ya le había dado capa Raimundo en una fiestecita campera, ¡como suplicaba Antoñita al ver embestir al animal en esas condiciones, que no vendiera a “Madrileña”.
Indudablemente eran otros tiempos, ese “romanticismo” de la Fiesta y sus gentes ha pasado de moda, no quiero con esto hacer otro capítulo comparándolo con los tiempos actuales, considerando que para todos estos lectores que pudieran identificarse con lo narrado, conmemoren con nostalgia viejas costumbres, dejándoles un buen sabor de boca y por un momento hagan volar su imaginación, apreciando esa imagen y ese aroma imposibles de volver a percibir.
Quisiera finalizar con una lección del maestro Raimundo diciendo: 
Que en el mundo del toro unos se marchan, pero siempre surge la sabia nueva. Mientras sigan cerrando la calle de un pueblo cualquiera de nuestra ESPAÑA, salga una vaca y un chaval avispado lleno de ilusiones dé sus primeros muletazos no morirá la FIESTA. Este pequeño relato es un homenaje dedicado a esos TOREROS con mayúsculas porque en ellos está todo el romanticismo y afición del toreo. Después de tantos años de dura lucha en las capeas, con las ilusiones perdidas ya de llegar a ser figura y sin dinero, siguen fieles en su empeño y en cuanto sale un toro, vaca o becerra en cualquier calle o plaza, se pegan codazos por ponerse delante los primeros. Sin dinero, sin gloria ni aplausos, solo su satisfacción personal de medirse ante el animal, si hay suerte y el toro se deja hacen su toreo, el que todos FIGURAS Y CAPEAS llevan dentro. Pues no hay que olvidar que el toreo es grandeza y ese maletilla que se podía ver en cualquier capea llevaba dentro el “ser capaz” de soñar y a la postre aunque le costara la propia vida valía la pena por ser, FIEL A UNA AFICIÓN.

Dedicado a mi maestro Raimundo y mis amigos Antonio y José Luís Traver, asi como a tantos y tantos maletillas de aquella época inolvidable.

 Mi maestro Raimundo ante "madrileña"

 Capea en Villastar (Teruel)
Los maletillas bien organizados

Raimundo Navarro en un Festival en Teruel

CURRO DIAZ ROMPE CON SU APODERADO

Tras 9 años de relación profesional

Rompen Curro Díaz y su apoderado Ignacio González

Curro Díaz e Ignacio González han puesto punto final a su relación de apoderamiento. La ruptura se ha producido de mutuo acuerdo tras nueve años juntos.

"Me queda un amigo y la felicidad personal de haber apoderado a un torero de la categoría de Curro", ha declarado a APLAUSOS Ignacio González, que añade: "Continuaré yendo a verle torear por lo mucho que me hace disfrutar como aficionado. Le deseo todo lo mejor".

Curro Díaz ha participado este año en 12 corridas de toros, en las que ha cortado un total de 19 orejas.

Madrid: Rescoldo de la tarde de los 'pablorromeros' / Fotos la Loma

 

 Monumental de Las Ventas de Madrid
21 de Septiembre de 2014
Corrida de 'Partido de Resina'
-Fotografías: La Loma-

Enlace relacionado

 Domingo Castillo

Sebastián Palomo Linares, 
último torero que cortó un rabo en Madrid (1972)

 Palomo Linares entre el matrimonio paisano de Torres

Dos matadores, Palomo y Domingo Castillo


 Palomo Linares y Andrés Amorós

 Gonzalito el Grande

 Gonzalito y Domingo Castillo


 Minuto de silencio por la muerte de Manolo Carra