El pasado fin de semana viví una de esas experiencias que te revuelcan la conciencia y el entendimiento. Fui invitado por la muy Honorable Hermandad de San Marcos de Beas de Segura, para dar una de las charlas del Ciclo Cultural Taurino, que se vienen celebrando desde hace 18 años.
Decir que el viaje a la Provincia de Jaén atravesando La Mancha y sus pueblos, comenzando por Manzanares, donde fue herido mortalmente Ignacio Sánchez Mejías, el que con su muerte provocó en Federico García Lorca unos de los mas bellos poemas de la letra castellana, fue el prólogo a una cascada imparable de sorpresas que te dejan con el corazón henchido de emoción, es poco decir.
Ver las suaves colinas de las faldas de la Sierra de Cazorla y del Segura, cubiertas por bucles y rizos interminables del oro amarillo al que los jienenses entregan sus vidas y sus mayores esfuerzos, fueron premonitorios a lo que luego íbamos a vivir, una vez que llegamos a Beas y fuimos recibidos por los gentiles miembros de la Hermandad, quienes no hicieron otra cosa durante nuestra visita que agasajarnos con sus amables atenciones, que incluyeron una visita al singular Castillo de Segura de la Sierra y a su bella Plaza de Toros.
Nuestro propósito era celebrar la declaración de la Tauromaquia como Patrimonio Cultural de Beas de octubre pasado y resultó que descubrimos un lugar en donde se vive la Fiesta de los Toros de una manera tan intensa y profunda, formando parte de lo mas íntimo del ser de sus habitantes de cualquier edad, sexo o condición, que los sorprendidos fuimos los visitantes.
Fue entrar a la sede de la Hermandad y ver que hay “13 toriles 13”, perfectamente construidos y hasta con aire acondicionado, en donde se guardan los toros los días de la Fiesta, para preguntarnos que si aquello que estábamos viendo podía ser real. Ya en la segunda planta nos esperaba un salón repleto de aficionados que habían acudido al llamado de su profundo amor a sus Fiestas de San Marcos y al Toro como parte esencial de las mismas, entre ellos grandes aficionados como D. Manuel Torres, quien viajó expresamente desde Baeza para acompañarnos en este acto, como D. Ramón Rubio que lo hizo desde Granada, o D. Manuel Barneo, Diputado Provincial, que lo hizo desde Jaén.
Resulta que en Beas se celebran las Fiestas de San Marcos durante dos días, con la suelta de entre 70 y 80 toros de cuerda o ensogados de manera simultánea, bellamente engalanados y “cascados”, es decir les colocan cascabeles alrededor de sus cuellos para advertir del peligro a quienes, año tras año, salen a jugarse la vida en un ritual inmemorial cuyo origen se pierde en las brumas del tiempo, con la singularidad de que muchos de estos toros, o vacas de gran trapío que también se sacan, son criados desde recién nacidos en las fincas y casas de los beatenses, caso único en la tradición de los festejos populares.
Con D. Lope Morales, Director de los Ciclos, D. Dª Marisa Fernández y D. Alberto de Jesús, Director de la Revista Bous al Carrer, compañeros de ponencias, junto con el Alcalde D. Sebastián Molina Herrera, D. Javier García Martínez y D. Dionisio Martos, Presidente y Vicepresidente de la Hermandad, compartí opiniones que fueron acogidas con auténtico beneplácito por la concurrencia, que se ha rebelado contra la decisión de la Junta de Andalucía de hace 20 años, que les obliga a matar sus toros y vacas una vez que son corridos, causando una profunda pena a sus propietarios, hombres y niños, que lloran esa pérdida y que con esta cicatriz, fresca aún, se resisten a que esta afrenta continúe.
Sorprenden aún mas los testimonios gráficos de cómo los beatenses una vez que terminaba la Fiesta se llevaban andando los animales de nuevo a sus casas y fincas, de allí que resulte inaceptable que se les haya cortado la tradición de sentir al Toro como lo sienten, como uno mas de los suyos con el que se divierten y junto al que rinden su devoción a San Marcos.
Pero Beas de Segura no es sólo toros, también hay una gran afición a la música de cámara y el broche de oro del Ciclo Cultural Taurino lo puso un Trío de Clarinete D´ Alló Més, que deleitó a los asistentes con bellas melodías, cuyo director nos dejó perplejos con su valiente y fundada afirmación: “Somos amantes de la música, pero también somos aficionados a los toros, para nosotros prohibir los toros sería tan absurdo como prohibir la música”!! Ahí queda eso!!
Por esto y porque llegó la hora de ponerle un freno a todos los que nos quieren coartar la libertad de disfrutar nuestras tradiciones y costumbres de manera auténtica, que nos amenazan y persiguen con sus prohibiciones y atropellos, y sobre todo después de lo que viví este fin de semana en Beas de Segura, es por lo que con todas mis fuerzas exclamo: !SOY SANMARQUERO!
Williams Cárdenas Rubio
Madrid, 20 Abril 2012