lunes, 27 de agosto de 2012

Ha muerto Manolete ¡Gloria a Manolete!


Aquí les dejo la extraordinaria aportación de José Olid Planet. Literato, tertuliano, conferenciante, periodista, escritor;  y por encima de todo un extraordinario aficionado y gran AMIGO. Gracias Pepe, por enviarme el encargo solicitado como inicio de la Real Feria de Linares y dar con tu aportación sabiduría al aficionado y una gran categoría a este Blog. Gracias amigo.

Mañana Día de San Agustín
Comienza la Feria de Linares

 El Arte lo transfigura



Digo desde el Respeto:

La necesidad de crear un mito para seguir vendiéndolo se impuso a todas las corrientes de una España falta de ídolos y referencias sociales. El respeto a Manuel Laureano Rodríguez Sánchez Manolete pervivirá desde todos los públicos, profesionales, artistas, políticos e intelectuales a través de los tiempos, pese al mal uso dado por el oportunismo, tanto literario como periodístico e incluso político, éste el más vil. 

 Manolete. Media de frente

Un hito social. Pronto, las figuras del Toreo, que de siempre habían sido referencias sociales, dejarían de serlo. Hoy Manuel Rodríguez Sánchez “Manolete” y después de seis décadas y media, continúa siéndolo. La Medalla de la Beneficencia, qué le fuere impuesta por el Marqués de la Valdavia al paso de la comitiva de su entierro por Tendillas, me obliga a una pregunta ¿Cuántas de Bellas Artes hubiesen tenido cabida en su categoría y dimensión?

Recuerdo textualmente palabras de Don Francisco Auladell, mi catedrático por excelencia de Literatura -los he tenido buenos- quién definía El Arte como “toda aquella expresión capaz de dar sensación de estética emocionando”. El Toreo, y sobre todo el de Manolete, bien que produce, incluso desde el recuerdo, esa condición con largueza suficiente como para llamarle Arte sin la más ligera de las dudas. 

 AYUDADO. Pero de Manolete

Marcando una época en el Toreo lo revoluciona y encumbra. Aún no había evolucionado el Toro suficientemente, y construyó la base de su faena con el Toro de su tiempo, proveniente de camadas abiertas durante una guerra, que si bien diezmó la fe de los hombres que la padecieron, a la vez que el número de cabezas en las ganaderías, asentó la casta del Toro bravo para unos lustros más. No crean que el Toro de Manolete, pese a criterios de la oficialía de los dineros, por tener menos arrobas era menos Toro. Manolete llegó antes que su Toro.

Con él los cánones aparentemente se tambalean, pasando a cobrar seguidamente mayor rigor en el Toreo; toda vez que ejecutando en ese inexplicable espacio, aquí y ahora, con esa su proximidad entra en una dimensión en la que a partir de la referencia manoletista, deja definida la forma en que ha de expresarse la nueva concepción. Para, templa y manda, se está y obliga; templa, acompaña y exige, arriesgando en el ajuste de las distancias, para mandar sin lugar para la enmienda, demostrándole al Toro quién es el amo de los terrenos. Gratuitamente se ha dicho que con Manolete no había terrenos. Sí que los había, pero se los ganaba a todos los toros.

 Un hombre

He escrito “acompaña”, haciéndolo de forma muy especial en su toreo de capote y en la suerte de matar en la que aporta el temple -nadie lo había hecho- con ese recrearse en la suerte, interpretado como carácter principal en la definición de su Tauromaquia. Perfil y a pies juntos, casi siempre sí, pero dentro de la suerte, estando tan dentro de ella que no necesita echar la pierna -esto para los confusos- pues ya no cabe más entrega. Ha definido las distancias en las que a partir de ese momento debe construirse la faena.

Manolete se adelantó con su toreo al Toro que exigía. Jugó fuerte, muy fuerte. Sin Camará y sin su muerte, con su Toreo que había quedado suficientemente expreso, se hubiera conocido el Toro de su exigencia en la Fiesta y que aún no hemos sabido ofrecerle, dado que el factor economía que priva entre los que presumen de toros artistas, lo ha impedido.

Situémonos por unos instantes, imágenes virtuales fuera de la retina en ese laboratorio de creatividad que es la mente humana, ante un Manolete y frente a él cualquiera de los Saltillos amejorados actuales, por poner un ejemplo sin dejar de reconocer que en el campo bravo hay cosas tan buenas como éstas y, tan dignas de mención.

¡Qué cotas de emociones continuadas! ¿Se lo imaginan también? Mientras escribo vuelan mis percepciones. Me siento perdido en el “hábitat” de mi imaginación. Las cadencias de sus faenas, sus contrastes, esas repetidas embestidas del Toro al que se ofrece, dominadas por su profundidad y entrega; todo posiblemente incomparable. Me siento como transportado por los ritmos orgánicos del Universo, cuyas convergencias e intersecciones nos replantearían la relación entre elementos y riesgo, público y arte, autor y obra, tragedia y gloria.

La propuesta manoletista va del drama a la tragedia. El drama siempre presente indujo a la tragedia y con ella a eso del “mito” que se dice de él -no lo comparto-, porque Manolete es tangible, es real, es un hombre. Ese drama que pretendiendo recrearlo surge y resurge, aparece y desaparece, época tras época, generación tras generación. Sucede siempre, retorna al mismo lugar, el mismo punto de partida, Manolete y su Verdad.

Manolete punto de partida me inspira como así mismo a tantas plumas ilustres, cineastas, intelectuales y a sus fieles detractores que con su absurda controversia tanto lo negarían para finalmente asumirlo en toda su dimensión; algunos lo conseguirían plasmar, otros no tanto y los más no alcanzaban la dimensión que tan generosamente proporciona el personaje. Es por ello que muchos, buscando vender su memoria, lo enclaustraron como “mito” en un altar de irreverencias, cuando a él, a Don Manuel Rodríguez solo le cabe en la Gloria. ¡Gloria a Manolete!

6 comentarios:

  1. El Meques27/8/12 13:08

    A eso se le llama "claridad de conceptos".
    GLORIA A MANOLETE!!!

    El Meques

    ResponderEliminar
  2. El Principe27/8/12 13:57

    Todos esos que lo convirtieron en mito, lo hicieron a su conveniencia , y sobretodo porque no tenían capacidad para argumentar en que basar con criterios y elementos de juicio los fundamentos de su Toreo, y posiblemente de ningún otro torero
    Fueron a aprovechar su fama y su personalidad para hacer comercio.
    No he leído nada más que chismes sobre él. Puede que a alguien, como le sucedió a Navalón, no lo entendiese, pero de ahí a no saber entender su Toreo y tener el santo valor de escribir su biografía, considero que es de insensatos o de aprovechados.

    El Principe.

    ResponderEliminar
  3. El Principe27/8/12 13:58

    ¡¡¡Gloria a Manolete!!!

    El Principe

    ResponderEliminar
  4. DE NEGRO LUTO LOS CAMPOS

    ¡Es que un Toro ha “matao” a Manolete!

    Ya no hay vida
    bajo los encinos recios;
    ni bajo los verdes mares,
    de olivos.

    No veo los toros, ni mis vacas,
    ni sus sombras reflejadas,
    por la noche en la dehesa.
    Ni la luna plateada,
    de verde luna, sobre los campos.

    Está de luto el olivar;
    y sin sombra las encinas.
    De luto el verde pasto;
    lo ha visitado la muerte...
    y de pronto,
    ha dejado de ser verde.

    ¡Es que un toro ha “matao” a Manolete!

    solanera

    ResponderEliminar
  5. El Chacho27/8/12 17:20

    El Monstruo ya en vida fue presa de los golfos cazadores de mitos. Tras su muerte aún más. Me gustaría tener la sensibilidad de Pepe Olid para llegar e esos momentos de intersección, de poder entrar en ese laboratorio de cratividad para imaginarme a Manuel.
    Bien aventurados los imitadores, por qué de ellos serán nuestros defectos. Hasta en los defectos era grande. Mañana Linares, una plaza que en manos de sus empresas, solo ha sabido vender a Manolete.
    GLORIA A MANOLETE.

    El Chacho

    ResponderEliminar
  6. El Bachiller Cantaclaro II27/8/12 18:23

    Si el canto, si la elegía, si la lírica contenida en ese articulo sobre Manolete de ese gran amante -él dice bendita locura- que es el autor qué lo firma, manifiesta un sentimiento, las tres estrofas de solanera que aparecen en comentarios son un auténtico desentrañar del alma en sus expresiones, transportándome al campo, imaginándome el olivar sin brillo, la dehesa sin luz y los campos con el verdor perdido, los que como presagio de algo malo, muy malo va a suceder o ha sucedido.
    Llevo una temporada que los veo tan...así. La Fiesta está herida de muerte.
    Gloria a Manolete.

    El Bachiller Cantaclaro II

    ResponderEliminar