Interesante reportaje ayer después de la corrida de
Pamplona en Canal +.
El maestro Dámaso González volvió a triunfar, esta
vez delante de las cámaras de televisión.
Escuchar toda su trayectoria, anécdotas,
experiencias e incluso opiniones muy personales me llenaron de satisfacción.
No lo voy a negar, fue y sigue siendo mi ídolo; y
creo que ya a mi edad difícil será que llegue nadie a quitarle el puesto,
aunque en verdad tenga admiración por un par de toreros, no más.
Damáso como algunos le llamaban, volvió a dar toda
una lección, no solo de tauromaquia, sino
de honestidad, humildad, caballerosidad, amor a la profesión, vergüenza
torera, pero sobre todo respeto a la profesión y a los toreros, para dejar un
buen camino a los que llegan por detrás -en mi opinión todo lo contrario que
ocurre hoy- algo que recalcó muy por encima de otros aspectos.
Tampoco olvidó a quienes le ayudaron, algo que dice
muchísimo de una persona. Sus vivencias por la provincia de Jaén y el resto de
España, cuando a pesar de las necesidades habidas en tiempos difíciles, todavía
era España.
Gracias una vez más torero, gracias una vez más
maestro, gracias una vez más Dámaso, por dar toda una lección de hombría,
honradez y torería.
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