TENTADERO PÚBLICO // PLAZA DE TOROS DE CASTELLAR

Hay un refrán muy popular el cual dice: “Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña”; y eso precisamente es lo ocurrido en la Plaza de Toros de Castellar.

Estuvimos hablando con su Alcalde el Excmo. Sr. D. Gabriel González Villanueva y nos dijo al respecto que la Tauromaquia es una seña de identidad inherente en España, sí; pero que aquí en Castellar era algo más, es una seña de identidad de sus habitantes y que el acto celebrado, al ser algo que no todo el mundo tiene la oportunidad de asistir a un tentadero en alguna de las muchas ganaderías que tiene la provincia, que mejor que traerlo a su plaza de toros para que todo el mundo pueda disfrutar de una de las tareas más importantes que se realizan en el campo bravo.

En esta ocasión y como no podía ser menos, este evento taurino ha ido dirigido para un acto solidario. El Excmo. Ayuntamiento de Castellar ha otorgado la iniciativa a una Asociación local sin ánimo de lucro como es AFIXA, Asociación de Fibromialgia y Fatiga Crónica.

Estuvimos hablando con Pilar Mora y Félix González, los cuales se encontraban en una de las puertas de acceso al coso, ambos gozaban de una alegría inmensa por haber llevado esta iniciativa y que el Ayuntamiento y todos los actuantes al festejo colaboraran para que todo ello llegara a buen puerto como así ha sido y poder recabar algunos fondos como ayuda para esta Asociación.

El paseíllo lo hizo el Matador de Toros Pedro de Flora, torero muy conocido en esta localidad, la cual fue el lugar elegido para tomar la alternativa. Le acompañaron en el mismo el novillero Pedro Romero “Romerito” y los grandiosos aficionados Paco Beteta, “El Ciri”, Enrique Arribas, “El Mergo”, “El Guindi” y “El Cejas”. Picó extraordinariamente el tentadero, su mayoral y picador de toros Dioni Ruiz.

Bravas y nobles resultaron las cuatro becerras tentadas, sobresaliendo en bravura en el caballo la segunda, la cual metió muy bien la cara abajo y apretó con los riñones.

El maestro Pedro de Flora fue dirigiendo el tentadero magistralmente y todos los actuantes realizaron con nota alta la dura y difícil faena de campo, mucho más difícil y dificultosa en un aplaza de toros, ya que los animales pierden el silencio campero por el runrún de la plaza y suelen estar pendientes a todo lo que se oye y se mueve; así y todo como digo, las vacas fueron extraordinarias.

Por tal motivo, raza, casta, nobleza y bravura, pudimos ver a un buen Matador de Toros disfrutar ante una brava res a la cual le dio su sitio, haciendo ver a todos la calidad de la misma. Al novillero “Romerito”, como siempre, valiente y con muchas ganas de agradar, no hay quien pueda decir que este muchacho no tiene afición, siempre que le hemos visto, lo ha dado todo. Y como no a unos grandes aficionados, de los cuales vimos unos extraordinarios capotazos y muletazos de verdadero sentimiento, llegando con fuerza a esos tendidos de buenos y entendidos aficionados.

Si quisiera dar mil gracias a todos los actuantes, amigos todos, los cuales y bajo el beneplácito de su Alcalde, Gabriel González, me invitaron a dar un par de tandas a la última becerra de la tarde, una becerra que había que estar muy firme con ella, no era “la tonta el bote” pero tuvo tanta nobleza y fondo que me permitió dar un par de tandas con la derecha donde disfruté enormemente, la verdad fue el mejor regalo de cumpleaños que me podían hacer, obtener ese regalo a mis 58 años, era algo que no estaba en mi mente ni en mi agenda, gracias amigos, muchas gracias a todos.

La Asociación Afixa y el Excmo. Ayuntamiento de Castellar quisieron agradecer a todos los participantes su desinteresada actuación y les hicieron entrega de un regalo por su buen hacer.

Para finalizar decir que Castellar vuelve a demostrar su gran afición, su gran saber taurino, su solidaridad con los más necesitados y que su Ayuntamiento vuelve a expresar una vez más que no se gobierna para uno mismo, no se gobierna para los intereses personales, sino para un bien común, para todo un pueblo en general y que Castellar entre otras muchas cosas que lo hacen importante, Castellar es Tierra de Toros.