martes, 21 de septiembre de 2021

HOY EL TORICO LUCE PAÑOLICO NEGRO

 

A LA MADRE DE UN TORERO 


Para ti Alejandrina, madre de torero igual que lo fuiste de muchos chavales que empezamos ese difícil camino y no conseguimos llegar a la meta.

Nos dejas el último día de verano y emprendes el viaje junto al Altísimo en este primer día de otoño, un día que todos los que te queremos, recordaremos durante nuestra vida.

Fueron tantas las vivencias, los momentos que compartimos en ese coqueto “Bar Luís” donde solíamos juntarnos los por entonces “maletillas” para emprender viaje a cualquier pueblecito de tu querido, nuestro querido Teruel, para antes de la partida tomar tus deliciosos “cafés-bombón” que con tanto amor nos preparabas, esa copa de revuelto de mistela y aguardiente para los más mayores; y ese “tener cuidado hijos míos” con el que nos despedías y esa sonrisa al regreso cuando volvíamos a reunirnos en tu casa para tomar un refresco.


Recuerdo a José Luís, tu niño, un niño por entonces de 4 o 5 años ya daba sus primeros pases con un mantel o servilleta y hacía las delicias de los que allí estábamos y que más tarde llegara a enfundarse ese traje de héroe que es el traje de luces y las incomprendidas circunstancias de la vida no le dejaron llegar a esa meta tan soñada desde muy niño.

Como no recordar a tus queridas hijas, Rocío, Mar y Ángeles, tres Marías que te adoran y que aún están acompañando tu cuerpo ya inerte, sin vida aparente, porque en realidad siempre estarás viva y llena de vida en sus vidas, en nuestras vidas.






Hoy el “torico” está de luto, todos los corazones de quienes te queremos está de luto. Ese “rincón” tan taurino, ese cruce de caminos para los “maletillas” de antaño, en ese lugar llamado “La Colmena” está de luto, el agua de su fuente frente a ese Templo Franciscano está de luto y fluye con tristeza, pero haciendo más ruido que nunca.


Hoy Alejandrina, serás una de esas personas que brillarás cada noche allí arriba, como brilla esa estrella que luce sobre nuestro querido "Torico de Teruel". Hoy, Alejandrina, serás de esas personas que estarás en nuestros sueños día y noche. Hoy, Alejandrina, serás de esas personas que dejarás huella, momentos y recuerdos inolvidables. Hoy, Alejandrina, serás de esas personas a las que nos quedaron muchas cosas por decirte. Hoy, Alejandrina, serás de esas personas que esperamos volver a ver en ese Cielo, en esa Vida que como tú, deseamos alcanzar en el fin de la nuestra; y que por ahora lo único que podemos decirte es que te queremos.

Para ti Alejandrina, gran mujer, buena esposa de un gran hombre como fue Luís y que hoy te encontrarás nuevamente con él. Para ti Alejandrina, madre de torero, que siempre supiste guiarlo, porque las madres de los toreros, son un poco más madres.

Yo Alejandrina, aunque hace muy pocos días cumplí los 48 años de mi llegada a tu tierra, a mi tierra de adopción, la que me convirtió de niño a hombre, la que me hizo amar y sentir como amaron y sintieron esos Amantes de Teruel; hoy desde estas tierras andaluzas que tanto eran de tu agrado y tan fiel eras a su cadena televisiva; te doy mi, no adiós, eso nunca; te doy mi hasta luego y que cuando llegues a estar en ese paraíso que van las buenas personas le des un gran recuerdo a quien junto a ti, alentó a ese puñado de “torerillos” que con tanta ilusión compartimos café en tu casa, sí, has acertado, el gran Raimundo, otra persona muy recordada para mí en estos momentos.

Ya solamente queda pedirte que desde los “toreros cielos” nos guieis a quienes tanto os quisimos y que siempre os recordaremos.

¡Adiós Alejandrina! ¡Adiós Reina! ¡Adiós Madre!, que la Virgencica Emerenciana y La Pilarica te lleven de la mano ante el Supremo.

Descanse en Paz Alejandrina Rodrigo, madre de torero.