Repaso algunas páginas taurinas donde se pueden leer
buenos artículos sobre la Suerte de Varas, me paro en una de ellas y leo a un
gran aficionado, José Mª Moreno Bermejo.
El objetivo es claro y
a buen seguro que será compartido por muchísimos aficionados: dignificar la
suerte de varas, que con el transcurso de las últimas décadas ha ido cayendo en
vicios y deformaciones que desvirtúan en mucho su sentido, constituyendo sin embargo
una fase insustituible de la lidia y el toreo.
El empeño del autor no puede ser más claro:
“La belleza de la Suerte de Varas se ha olvidado tras la generalización del
puyazo asesino. El dignificar este bello arte debe ser nuestro objetivo”.
Poco aficionados serán los que este en desacuerdo en este propósito, porque
precisamente la suerte de varas es la que un mayor deterioro y retroceso ha
sufrido con la lidia y el toreo moderno.
A este empeño responde el trabajo de este
conocido y solvente aficionado. El autor no se olvida de reclamar la colaboración
de los criadores de bravo, para que se “quejen con vehemencia por la
vejación que el abuso en los puyazos infringen a sus toros”. Pero también
de la autoridad, de los Presidentes de los festejos, para que denuncien los
puyazos antirreglamentarios y sobre todo negadores de un punto esencial de la
lidia. Pero también a los propios toreros les debiera corresponder en este
punto su labor: la de poner fin a esos puyazos interminables, que dejan la
lidia vacía de contenido. Reclama, en fin, la actuación activa de
los aficionados, para que sepan reclamar que “la dignidad de la
Fiesta está en que el toro a lidiar no esté vejado para que el torero esté más
cómodo”. E incluso sugiere que debieran ser los propios picadores para
poder realizar la suerte de manera acorde a las condiciones del toro.
Para que leer más, entre los que nombra el
señor Moreno está los presidentes, él, lo pone en mayúsculas, yo lo pongo en
minúsculas, ya que concretamente alguna de las plazas de toros -también en
minúsculas-, a la que me refiero, así lo merecen al haber perdido categoría en
pocos años respecto a las actuaciones presidenciales, las cuales podrían
tipificarse como de perfectos ignorantes, aunque ella todos sepamos que no
eximen de responsabilidad. “Señores” presidentes quienes constantemente están
dando “patadas” al reglamento taurino, merecen otros calificativos, pero los
obviaré entre otras cosas, porque entre ellos los hay que son capaces de declarar
en falso aunque lo hagan bajo juramento -pueden imaginarse a quien me refiero-; conceptúen o califiquen ustedes mismos
a estos personajes que representan nuestra querida Fiesta.
Reclama la actuación activa de los
aficionados, a lo cual le apoyo incondicionalmente; por suerte los aficionados
de Jaén tenemos un buen lugar donde podemos aprender anualmente sobre esta
bonita Suerte del Toreo que poco a poco, entre todos los que intervienen en una
corrida de toros -incluidos presidentes, los que más- se están cargando a pesar
de que intuyo algo está cambiando con respecto a la referida Suerte de Varas o
al menos así me pareció en una estupenda exposición de Plácido “Tito” Sandoval
en la localidad vecina de Sabiote.
El aficionado, a pesar de la “dictadura”
que pueda ejercer contra él, el propio reglamento taurino en cuanto a lo
referente a reclamar desde el tendido su posición, debe seguir luchando, pues fijándonos
bien en algunas frases curiosas, ni siquiera encontrarás en el diccionario “ÉXITO”
antes que “ESFUERZO”, ni TRIUNFAR” antes de “LUCHAR”, algo que muchos “USÍAS”
deberían aprender antes de sentarse en un Palco Presidencial y convertirlo en
su “POLTRONA” particular; aun así los aficionados debemos seguir luchando
contra estas y otras ilegalidades cometidas en contra de la propia Fiesta.
Y todo esto pasa porque en algunos Palcos
se actúa de manera tan tonta como cantarle saetas a un paso, de peatones. Y es
que el amiguismo unido a la picaresca tan típicamente española, se pone de
manifiesto en los toros en grado superlativo y así seguirá mientras la
Autoridad, la verdadera, la obligada a ello por Ley, siga dando cancha a “bufones
de la corte” en lugar de hacerlo con verdaderos aficionados.
Para estar en un Palco y defender la
Fiesta, primero hay que hacerlo desde el desembarque de los toros y más tarde
desde el referido Palco, manteniéndose vertical como “Manolete” se mantuvo ante la
muerte aquella fatídica tarde en Linares y que únicamente se quebraba cuando
giraba la cintura en esos naturales y pases de pecho que pasaron a la historia
¿Se han enterado ustedes, señores presidentes?, pero para eso hay que tenerlos muy bien puestos y ser muy hombre ¿verdad? me refiero a los en minúsculas.
Me llama mucho la atención -ignoro quien
distribuye los burladeros en los callejones de las Plazas de Toros- ya que en
algunas, los fotógrafos tienen su burladero “cara al sol con la camisa nueva”,
pero bueno, eso no importa, total, en otras como la más importante del mundo,
las Ventas de Madrid, a pesar de estar cómodamente en sombra, están o justo
detrás del piquero y no se pueden tirar fotografía o cuando pueden hacerse
algunas a muy pocos les interesa como vemos palpablemente en la foto que vemos,
así que habrá que preguntarse ¿a quién interesa la Suerte de Varas?
Pues miren ustedes, a mí me interesa y así
se lo he inculcado a mis hijos, por cierto los tres grandes y buenos
aficionados hasta tal punto que aquí vemos las fotos de un puyazo tiradas por
mi hija en una pequeña plaza como es la de Jódar en Jaén.
Un gran toro de Enrique Ponce
Caballo y Piquero en volandas
Sujetando al toro
Puyazo bien colocado
Las órdenes del matador
La confianza
mata al hombre
En ellas podemos ver
como un buen toro del maestro Ponce levanta las cuatro patas del caballo y el
picador de Juan José Padilla aguanta sin tapar la salida hasta el punto que es
derribado, solo puedo decir que ha sido uno de los mejores puyazos que se han
dado este año en los festejos celebrados en la provincia, así da gusto amigos,
así da gusto malos presidentes, entérense; no esquilmen ustedes más los actos
de este rito ancestral que es la Fiesta de los Toros, váyanse a su casa enemigos
de la Fiesta, si no lo hacen, los aficionados nos iremos preocupando poco a
poco que vayan desapareciendo ¡ya está bien “señores”!
Fotos.- Ana Patricia Cisneros.
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