Peña Luis Moreno "Niño la Paz" de Linares

Toros y Flamenco, Flamenco y Toros, algo grande que como no podía ser menos, nace del pueblo, el verdadero, el indiscutible, el pueblo sencillo, espontáneo y legítimo; como legítimos son ambas manifestaciones en nuestra cultura.

Los Toros y el Flamenco, Patrimonios Inmateriales de la Humanidad, ambas Artes a pesar de los muchos detractores que tiene -sobre todo de los Toros- se van fortaleciendo y manifestando como artes que no tienen fronteras.

Quien puede negar que el Flamenco y los Toros están más que hermanados en innumerables aspectos? no en vano la historia nos da ejemplo de ello, muchos han sido los cantaores y guitarristas que han hecho el paseíllo sobre el dorado albero de las Plazas de Toros, Enrique “El Mellizo”, artista gaditano que fue de la cuadrilla del torero Hermosilla es buena muestra de ello, otros como el para siempre recordado “Camarón de la Isla” también tuvo el deseo de ser torero y aunque no lo lograra, ganamos un cantaor que ha marcado época como lo hiciera su íntimo amigo el “Faraón de Camas” Curro Romero.

Hoy les hablaré de una Peña Flamenca, la Asociación Cultural Flamenca Luis Moreno “Niño La Paz”. Una Peña Flamenca de Linares a pocos metros de la popular “Fuente del Pisar” en la carretera que nos lleva al no menos popular “Barrio de los Arrayanes” y a una de las ganaderías de prestigio en las cercanías de Linares como es la de D. Iñigo Garzón. En ella pudimos pasar una velada inolvidable donde como no podía ser menos estaba presente el titular de la misma, el maestro de guitarra Luis Moreno.

Junto al maestro Moreno, cuatro puntales -que cantara el maestro del mismo modo paisano Juanito Valderrama- que amenizaron una noche que convirtieron en mágica para los allí presentes; los guitarristas “Morenito” y Rafael “Niño de la Fuente El Pisar” junto a los cantaores Andrés de Magdalena y Sonia, componentes del Grupo Plomo y Plata, emblemático nombre que ensalza perfectamente al pueblo minero de Linares; departieron cantes tocando varios palos como pueden ser el fandango, colombianas, tangos………..

No voy a negar mi emoción, pues al escuchar a estos artistas me vino a la mente el maestro de Linares José Fuentes, mi buen amigo José ¡qué gran torero, Dios mío! El toreo, el verdadero, el grande, todo buen aficionado sabe que es enfrentarse al toro, parando, templando y mandando en sus embestidas, elevando de esta manera el toreo hasta la culminación que lo cristaliza en ARTE, como lo hacía José.

Del mismo modo sentí, sin ser un entendido en la materia -ni de toros, ni de flamenco- y porque solo entiendo de lo que me pone los pelos de punta, de lo que me llega de verdad y con verdad al alma, el rasgueo de una guitarra, las palmas, ese quebranto de la voz flamenca de Rafael, Andrés y Sonia, ese “quejío” que les salía de lo más profundo de su ser como el buen toreo y que a compás de los presentes formaba un ritmo que de igual manera que elevaba el cante, engrandecía a los cantaores y; la conjunción de ese todo es lo que origina ese referido “compás”, un compás que al igual que en toreo, si carece de él, no dicen nada.

También está el “duende” ¡ay el duende!, algo invisible pero que está muy presente en la cultura de Andalucía y que embruja a quienes nos visitan, y embruja a gente de cualquier sector social, porque el Flamenco sin necesitar en la mayoría de los casos de escuelas especializadas, alcanza un gran nivel por ser una manifestación artística pura y netamente popular.

Si quieren pasar un rato donde vivir, donde sentir, no lo duden; visiten los viernes por la noche esta Peña Flamenca, donde además los sábados y domingos pueden disfrutar de una buena gastronomía de la tierra, a buen seguro no se arrepentirán y puedo asegurarles harán amigos.

 Entrada a la Peña Flamenca

 Un rincón de la Peña

 El tablao

 Con mi mujer (a mi Izda) y unas amigas

 Otro bello rincón

 "Morenito" a la guitarra. Al cante Rafael “Niño de la Fuente El Pisar”

 "Morenito" a la guitarra. Al cante Andrés de Magdalena

 Sonia, al cante

 Luis Moreno (sentado a la derecha) maestro de guitarra

y los cuatro actuantes