lunes, 2 de mayo de 2016

LAS CRUCES DE MAYO EN LINARES


Ayer domingo tras pasar unos agradables momentos de buen yantar, amigos y artistas en Rejoneo & Copas, tuve la oportunidad de recorrer algunas de las Cruces de Mayo expuestas en distintos lugares de esta bella ciudad minera, torera y cantaora.
No podía tener mejor anfitrión, tuve el honor de que el maestro Paco Bautista, conocido torero quesadense pero considerado de Linares, me mostrara alguna de ellas.

La verdad que como en todos los conceptos de la vida, unas me gustaron más que otras aunque por eso no dejo de felicitar a todos en general, a todos los que con su esfuerzo y trabajo realizan esos bonitos trabajos para delicia de quienes las visitamos.
Después de darnos una larga pero encantadora caminata había que tomar un refrigerio, por lo que no hubo mejor sitio para ver de paso otra de las Cruces como la Peña Flamenca La Taranta. Fue una verdadera sorpresa la que me tenía guardada el maestro, pues no quisiera menospreciar a nadie como he dicho anteriormente, mucho menos a las tres Cruces clasificadas; pero admirando le Cruz de la Peña La Taranta, tengo que confesar que lo primero que se me vino al pensamiento fue la idea de que quizá el respetable jurado pudiera haber estado a favor de la corriente tan de moda como es el anti-taurinismo o la falta de apoyo a tantos y tantos conceptos culturales que nacen de la raíz más profunda del pueblo, así lo pensé y así lo plasmo.

La Cruz de la Peña La Taranta, tiene -ya que aún hoy pueden visitarla- una cantidad de significados personales, cristianos, taurinos y artísticos que como he dicho, no quiero quitarle mérito a los premiados pero al menos a esta magnífica Cruz habría que haberle otorgado una Mención Especial; pero claro, para ello hay que entender el significado que la obra artística tiene y como he dicho tantas veces, quizá en el jurado faltó esa sensibilidad y esa falta de conocimiento artístico que debe de tener todo aquel que ocupa un puesto público; y con esto me refiero a todos los niveles, sobre todo al político, pero claro, con los asesores, vaya usted a saber sus conocimientos del mismo modo, se arregla todo, pues no señores, no es así, la Cruz de la Peña La Taranta vuelvo a repetir para que quede bien claro y para no quitar el mérito a los premiados, al menos se mereció una reconocida Mención Especial.
Si observan ustedes bien la foto de esta gallarda Cruz de Mayo, comenzamos por los cimientos, un suelo simulando un ruedo con albero, ruedo linarense donde un gran torero dio la vida e hizo que Linares fuera reconocido y siga siéndolo en todo el orbe taurino.






Vemos también una Cruz, símbolo cristiano rematado en forma de estoque con los colores de nuestra enseña, de nuestra Patria, tan denostados ambos e incluso rechazado por muchos políticos en lugares donde pueden ejercer sus voluntades. Sillas toreras, mantillas y otros adornos taurinos así como un traje con historia. Ese traje de luces es propiedad del torero Paco Bautista, fue el primer traje que diseñó el poeta Rafael Alberti -precisamente de condición política de los que hoy maltratan nuestra querida Fiesta ¡Qué casualidad!- para uno de los más grandes toreros que ha dado la historia y que nueva casualidad que estaba la tarde trágica de Linares, Luís Miguel Dominguín. Lo estrenó en Las Palmas de Gran Canaria alternando junto a Antonio Bienvenida y Miguel Márquez ante reses de Samuel Flores.
Posteriormente el sastre Álvarez, diseñó el mismo modelo para los maestros Paco Bautista y el Faraón de Camas Curro Romero. Paco Bautista estrenó este traje el 14 de septiembre de 1972 en Barcelona, siendo un regalo del empresario D. Pedro Balañá, en cartel Pepe Limeño y Gregorio Lalanda con toros de Antonio Pérez Tabernero, esa tarde el maestro Bautista cortó dos orejas y posterior el 27 de agosto en la Feria de Linares volvió a cortar 4 orejas y un rabo.
Señores jurados, en todos los ámbitos, para hacer el paseíllo hay que saber torear, de lo contrario entrenen, entrenen duro y fuerte, es la única forma de triunfar.

 
Hay que conocer y saber la historia de las cosas, la historia de la gente del pueblo, nuestras raíces, algo que a mi parecer pareciendo encasillarlas en épocas pasadas ya creídas olvidadas sea posiblemente el fracaso de tantas cosas actuales.
Por eso hoy más que nunca brindo junto a un torero por nuestras costumbres, por nuestras Fiestas y por nuestra cultura. Y como no, por España, mi país y Patria.