jueves, 15 de enero de 2015

…… Y VAMPIROS, YA !!!


Me lidiaría con este desgraciado tema todas las encerronas que quieran echarme, siempre y a sabiendas de que se obtendrían los frutos para colocar al Toro en el lugar de Respeto y Admiración que merece; y, del que tanto menoscabo se le ha hecho desde la mal llamada Edad de Plata del Toreo; la cual dividiría en dos fases, "antes y después de los petos", o mejor todavía "antes y después de la aparición de la UCTL" -usted querido lector-aficionado elige-; etapa ésta, consentidora inicial de unos petos tolerables y racionales, pero correspondiente a lo muy poco bueno que se disfrutó del Toro en cuanto a Casta y evolución natural de su Bravura. Va quedando atrás una época en la que los Ganaderos, prefiero obviar el mote de románticos; con decir simplemente Ganaderos -ya es decir- es suficiente. Todavía por aquellas calendas, piensan en echar carbón (Bravura) -la fortaleza se le presupone-; más como todo tiene su medida, al ser transformados aquellos suficientes petos en murallas acorazadas, ni que resucitase "Jaquetón", el camino sería distinto.

Después de la "maldita fratricida" y hasta la muerte de Don Manuel Rodríguez Sánchez "Manolete", todo es ilusión por mejorar; todo desde el Toro maltratado y desatendido, dadas las escaseces durante la contienda y las muchas más a partir de ella, hasta en la profundidad del Toreo; alcanzando éste las notas más sobresalientes de su Historia -todavía hay Toro-; pues la guerra abrió las ganaderías, se destrozaron cercas, y las vacas perdidas por la desatención y  el expolio, volvían a los dos años con dos reatas; y con ello, insospechadamente, contribuyendo a mejorar la raza.

Principio infame de hundimiento a partir de la aparición de Litri y Aparicio con la anuencia de Don Pedro Balañá Espinós y el sutil encanto de Camará con el "imperio del utrero".  Desde esta etapa, cómoda y pórtico de la decadencia, hasta la aparición, sobre los año 60 de los malditos específicos,  coincidiendo con la aportación de las cuadras de caballos especializadas en normandos y bretones de tracción -sin duda fruto del abandono de los estamentos del Estado-, se da paso a la más importante desvergüenza de la que jamás haya sido objeto la Fiesta.

Y desde ahí hasta los días que discurren domina el caminar indecente de una Fiesta prostituida por el dopado, bien como estimulador con la intención de equivocar a los equipos facultativos, o lo que es peor aun en un sentido distinto disminuir el comportamiento agresivo y fiero de la Bravura, y su acometividad y fortaleza. Todos los específicos usados en estos menesteres son conocidos por los Sres. Veterinarios y Presidentes de los equipos de las más importantes Plazas de Toros; y aún diríase, incluso de las menos. Veo en las sustancias dopantes usadas en contra de la Integridad del Toro, uno de los más importantes depredadores de la Corrida. Por otra parte la pasividad manifiesta de los responsables de inspeccionar tanto contrasentido me ahoga en el más amplio sentido de la palabra. Ejemplo:  Uno de los Presidentes de la Plaza de Toros de las Ventas Don Julio Martínez, agudo incisivo, sagaz y denunciante en Conferencias y Tertulias, en la práctica realidad se desvía notablemente de su criterio.

No lo entendemos ni nos convence la Teoría expuesta por algún responsable en el sentido de que no se dispone de instrumentos para aislar, sellar y garantizar una muestra tomada accidentalmente, para hacerla llegar en perfectas condiciones al laboratorio. Si un técnico, tras haberlo estudiado en la Carrera, no lo desarrolla es por dejadez humana o, de funciones lo que sería mucho más grave. Estamos adocenados, y ello no es de recibo.

No me sirve la explicación sobre el asunto, de que no se dispone de una infraestructura para llevar a cabo esta obligada competencia. Se diría que eso no es cierto cuando desde la Directiva de Residuos se realizan del orden, por prescripción de la CEE, son tomadas unas 50.000 muestras para sus correspondientes análisis, dentro de la especie bovina para consumo humano; por ello, cabe preguntarse: ¿El Toro de Lidia no es de consumo humano? ¿El hecho de que exista un Reglamento para el desarrollo de la Corrida,  exime del cumplimiento de las demás leyes incluidas las de rango superior?

Con éste han sido tres los artículos para Nuestra Tribuna con los que he tratado de colaborar en la extirpación de uno de los más importantes males que padece la Fiesta. De momento concluyo conformándome con disfrutar de la ilusión de que hayan sido tomados en consideración; y, si desde la latitudes del organigrama de la Fiesta ha sido leído, y consecuentemente les haya motivado, para en la medida posible acelerar su puesta en marcha, lo qué sería inimaginable a la par  que  satisfactorio para aficionado. VAMPIROS, ¡YA!!!!

Texto José Olid. Colaborador de Granada Costa para De Catafalco y Oro.
Foto.- Thayss Alba de Tormes.

2 comentarios:

  1. Se agradece tan valiente comentario que va a las entrañas de los males que han acabado con la Fiesta de los Toros.
    Y ahora vamos y nos creemos todos ,que el mejicano,Cutiño,Casas,que han sido colaboradores necesarios para llegar a donde estamos,van a salvar a la Fiesta.
    Tiempo (poco) al tiempo,para salir de dudas.

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