DON
SIN DIN
MIS
“ALAMARES EN LATÍN”
Plaza
de toros de Úbeda. Primera de feria. Tres cuartos de plaza en tarde de
temperatura excelente y un ambiente de, bueno, llamémosles “aficionados” que
evidenció ser atraídos por los grandes nombres del cartel; ya que se lidiaron
seis toros de Zalduendo, como dice el
refrán “grandes como sábanas” pero que abrigaron menos que “sábanas”, o dicho
en sentido bíblico, fueron semejantes
a sepulcros blanqueados, que por fuera parecen bonitos, pero por dentro están
llenos de podedumbre, salvándose de la quema
solamente el tercero de la tarde.
Independientemente
de lo dicho y si he de mantenerme vertical como “Manolete” se mantuvo ante la
muerte, que puede ser la mía taurinamente hablando, aquella fatídica tarde del
28 de agosto en Linares; he de decir que los toros fueron rotos y descosidos,
claro que, bien arreglados y guapos como para una pasarela con el buen oficio
de la artesanía del zurcido.
Enrique Ponce.- Oreja y oreja.
Cayetano.- Oreja y Ovación.
Ginés Marín.- Dos orejas y silencio.
CRONICA
DE LO ACONTECIDO
ENRIQUE
PONCE.- Ante dos toros sin opciones pudimos ver el magisterio, conocimiento de
los terrenos y la vergüenza torera de no defraudar a sus muchos seguidores que
tiene en la provincia.
Arrancó literalmente las orejas
ganándose la “Puerta de los Condestables” con mucha honra y honor.
Su primero un toro sin fondo
alguno, al que Ponce tapó todos sus defectos, dejando para el final de faena un
buen pitón izquierdo donde pudimos ver unos buenos naturales.
Su segundo, otro toro sin clase
alguna, rajado desde que pisó el albero de San Nicasio, Ponce en maestro y
conocedor del toro bravo, demostró su sabiduría y no le quitó la muleta de la
cara en ningún momento haciendo que la tomara hasta cierto recorrido porque al
final el toro buscaba la huida.
Recetó dos buenas estocadas
ganándoselas a ley ante lo acontecido que en manos de otro torero, hubiéramos
visto las consecuencias.
CAYETANO RIVERA ORDOÑEZ.- No pudo compartir
“Puerta de los Condestables” con sus compañeros, pero a pesar de ello pudimos
ver a un Cayetano de raza, un torero de valor y al igual que su compañero de
cartel Enrique Ponce, se ganó muy merecidamente la oreja de su primero, un
sobrero que tuvo que salir al quedar inválido y tirado por los suelos el toro
titular nada más salir y sin que llegara a rematar en el burladero de
cuadrillas.
En su primero
Cayetano saca la casta Rivera y se enfrenta a un toro imposible al que no puede
enhebrar faena ni tener continuidad ante la falta de embestida del toro, no se
amilana y no quiere dejar indiferente a un público que está con el torero dado
las ganas de agradar que demuestra. Mata de una buena estocada y es premiado
con una oreja a la casta demostrada.
Su segundo, otro toro
sin opciones, rajado y pegando coces en ocasiones, Cayetano plantado en el
tercio lo recibe doblándose por bajo para continuar de rodillas y rematando de
pecho, lo demás fue todo una lucha ante un mal toro. El fallo con los aceros
hace que sea despedido con una gran ovación por su entrega.
GINES MARIN.- Entrega en el
último de la tarde al que recibe por bajo y lo aguanta mucho en la muleta,
sobre todo en un parón del toro que queda pegado a los muslos del torero.
Un toro que se queda
corto y echa la cara arriba revolviéndose con presteza. Pone una estocada
arriba y tiene que utilizar el verduguillo siendo silenciada su labor.
En su primero, el
único toro que se dejó y que supo aprovechar el torero lo podemos titular:
GINES MARIN, EL
HONOR, SU PRINCIPAL DIVISA
Años hace, si señores
si, años hace que no se ve torear en Úbeda como lo hizo el torero extremeño
ante “Balanza”, que sin ser un dechado de bravura, Ginés Marín supo templar sus
embestidas desde su inicio de capote, unos lances de mano baja, con cadencia, con
elegancia, con dulzura, que llegaron rápidamente a los tendidos.
En el caballo no tuvo
una pelea de bravo este toro que tanto gustó a la concurrencia, pero como digo,
fue el torero quien lo hizo posible.
Nueva tanda de
templadas verónicas en el quite tras el puyazo.
En el tercio de
banderillas saludaron Manuel Izquierdo y Antonio Manuel Punta en unos buenos pares.
La faena de muleta
fue sensacional, siguió la tónica conseguida con el percal, mucha suavidad,
entrega, ligazón y perfecto toreo por ambos pitones.
Una estocada en todo
lo alto entrando entregado dieron paso a ser otorgadas dos orejas ganadas a ley
y el toro ovacionado en la vuelta al ruedo.
Puedo equivocarme
pero o muy bien afilados han de venir los estoques en la próxima corrida a
celebrar el día próximo sábado o el preciado Trofeo “Lagartijo” ya tiene dueño.
Otros momentos a
reseñar de la tarde fue la lidia de “Jocho” en el primero y la de Joselito Rus
en el segundo de la tarde.
El tercio de
banderillas protagonizado por “Fini” y Manuel Izquierdo en el tercero y los
pares de Antonio Manuel Punta en el sexto, los cuales saludaron desde el
tercio.
ENRIQUE PONCE Y GINES MARIN
POR LA PUERTA DE LOS CONDESTABLES