TOROS DE GARCÍA JIMÉNEZ PARA
PERERA, TALAVANTE Y ROCA REY.
¡QUE DESASTRE! ¡QUE BURLA!
Recientemente
se han publicado unas manifestaciones de Don Simón Casas que dicen “Si los
toros desaparecen, será por los taurinos”.
En la tarde
de hoy Don Simón estaba al lado del empresario de Sevilla. Es de suponer que
tras observar lo acontecido en el amarillo albero, ambos habrán podido
constatar la veracidad de esas declaraciones. Lo malo de todo esto es que ellos
lo saben y continúan en el error burlándose de una plaza llena como ocurrió
hoy.
Tras casi
tres horas de aburrido supuesto espectáculo, es difícil destacar algo
medianamente sobresaliente, pero no sería justo no acordarse de la lección de
torería, vergüenza y pundonor de CURRO JAVIER. Dando la cara, exponiendo su
vida después de dos sensacionales pares de banderillas, puso la plaza en pié.
Así hay que estar en Sevilla. Así es como la Fiesta no terminaría nunca. Pero
es predicar en el desierto.
Toros de
García Jiménez, anovillados, algunos casi abecerrados, sin cuajo, desarmonicos
otros, cluadicantes casi todos y las pocas embestidas que concedían eran sin un
atisbo de acometividad y por supuesto con nula emoción. ¿Hubo suerte de varas?
Con este
material bovino falla al completo el material humano, yerran los maestros,
Perera, frio, parecía ido, sin alma, muy mecánico. Fue pitado y con justicia al
finalizar el festejo.
Talavante
quiso dejar constancia de lo que mejor sabe hacer, que es el manejo de la
muleta. Enfrente tenía torillos sin casta con embestida borreguil y sumisa. A
uno de estos animalillos consigue enjaretarle algunos muletazos y como mata a
la primera viene el número de la presión al presidente blandengue. Toro caído,
peones que impiden llegar a las mulillas, mulillas que se retrasan, petición
bullanguera minoritaria y oreja de verbena. La prensa taurina amarilla mañana
destacarán la gesta.
Roca Rey
lidió los dos sobreros. El tercero titular descoordinado fue devuelto. Roca
ataca en la faena de muleta a un toro rajado con tendencia a tablas, tira de su
tauromaquia valiente y encimista y al menos consigue levantar un poco el ánimo
de los sufridos espectadores.
Lo del sexto
fue de traca. Sale al ruedo una autentica sardina. La protesta sube de tono y
el presidente blandengue, responsable de aprobar semejante birria de encierro,
saca el verde, rechifla general.
Roca lo
intenta con el torillo sardo, segundo sobrero. Abusa del pico y toreo desviado
esta vez. Se aburre y mata pronto.
Burla,
burlando………..y el aficionado aguantando.
Unión Taurina de Abonados de Sevilla.