Villanueva del Arzobispo (Jaén). Con medio aforo cubierto
se han lidiado dos toros de Fermín Bohórquez lidiados
en primer y cuarto lugar, dos de El Pilar lidiados en
segundo y quinto lugar y dos de Fuente Ymbro lidiados
en tercero y sexto lugar. Los lidiados en 1º y 2º lugar fueron unos toros de
escasa presencia y poco juego, el 3º de Fuente Ymbro fue un toro bravo; el 4º,
flojo, el 5º, con genio; y el 6º, bueno.
Manuel Jesús “El Cid”.- Silencio y dos orejas.
Cayetano Rivera Ordóñez.- Oreja y oreja.
Alberto Lamelas.- Dos orejas y
rabo y vuelta al ruedo.
Como todos los años llegadas estas fechas,
Villanueva del Arzobispo celebra en estos días sus fiestas en honor a la Virgen
de la Fuensanta. Días de diversión y ocio, reencuentro con paisanos que vuelven
año tras año para ver de nuevo a sus familias y celebrar estos magníficos días
de festivos. Son días de diversión y disfrute de una feria con una gran
cantidad de actividades, incluyendo por supuesto las del toro, algo que no
puede faltar en esta zona tan taurina de la provincia de Jaén, su Plaza llamada
la “Joya de Andalucía” por el propio Manuel Rodríguez “Manolete”, se engalana
para ofrecer unos carteles de lujo y el aficionado pueda disfrutar unas buenas
tardes de toros.
No se entiende unas
fiestas en Villanueva del Arzobispo, o en cualquier localidad de nuestra
provincia, si no está el toro presente. En esta ocasión protagonistas son los
encierros mañaneros, de gran tradición, acumulándose una gran cantidad de
personas que vienen desde los más distintos y singulares sitios de la geografía
española. Y como no, de sus festejos taurinos.
En esta ocasión una
corrida de toros, en la que destaca la presencia del torero Cayetano Rivera
Ordóñez. Torero el madrileño que siempre despierta un gran interés entre los
aficionados, sobre todo entre los más jóvenes, siendo todavía más especial en
el sector femenino. Así son las cosas, aparte de lo positivo que es, que
siempre acuda mucha gente a las plazas de toros al amparo de un personaje tan
atractivo como es el menor de los Rivera Ordóñez.
Eso siempre ha pasado,
todavía pasa, pero en la tarde del domingo los tendidos de la bellísima plaza
de toros de Villanueva del Arzobispo no acudió la gente que se esperaba, ni
mucho menos. Las razones pueden ser muchas y muy variadas; desde los precios de
las entradas o que el cartel en sí no estaba del todo rematado.
Cierto es, que el
cartel no era malo, había tres buenos toreros, todos con unas trayectorias muy
dignas, pero ninguno de los tres tenía nada que ver con el otro. En la
actualidad viven momentos muy distintos, quizás esa pueda ser una de las
claves, lo raro de ver a estos tres toreros anunciados juntos en el mismo
cartel.
Por unas causas u otras
la plaza registró poco más de media entrada, con un tiempo fenomenal, diríamos
que incluso algo de fresco conforme avanzaba la tarde, pero es que es un lujazo
ver un espectáculo taurino en un recinto tan bello.
Se lidiaron toros de
tres ganaderías diferentes, dos de Fermín Bohórquez, otros dos de 'El Pilar' y
otros tantos de Fuenteymbro. No se hizo sorteo, cada torero mató dos toros de
una misma ganadería. En fin, esto no debe de pasar, el sorteo de la mañana
sirve y mucho, no debiéndose cambiar por nada y mucho menos por los caprichos
de algunos toreros, además de no cumplir con el reglamento. Que tomen nota,
esto no debe de pasar.
El gran triunfador de
la corrida fue el diestro de Cortijos Nuevos Alberto Lamelas que cortó los
máximos trofeos de su primer oponente, siendo además el que mejor estuvo
durante toda la tarde. Para su comparecencia de Villanueva del Arzobispo eligió
dos toros de Fuenteymbro, que al margen de que estuvieron muy bien presentados,
fueron dos animales, el primero de su lote, tercero de la tarde, por bravo; y
el sexto por complicado. Dos toros que tuvieron interés, manteniendo la emoción
en los tendidos.
Qué bien estuvo Alberto
Lamelas en el tercero de la tarde. Lo cuajó con el capote con excelentes
verónicas, sobresaliendo las dos medias de remate, enroscándose al toro en la
cintura. Lleno de valor realizó un quite por “gaoneras” que resultó emocionante.
Cuajó Lamelas una gran faena de muleta, iniciándola con un pase cambiado por la
espalda en el centro del platillo, ajustadísimo al máximo, algo que puso el
¡ay! En boca del respetable.
Continuó Alberto toreando
por ambos pitones a su bravo oponente, citando al toro como mandan los cánones,
con el medio pecho y la pierna de atrás adelantada, dándole todas las ventajas
al animal. Las series llenas de mérito, cuajándole muletazos de trazo largo,
aunque el animal siempre salía con la cara arriba y buscando al torero.
Eso tiene las cosas de
la bravura, tenía buenos inicios, pero malos finales. La faena ganaba en
emoción conforme avanzaba, intensa por el mérito de estar ante el de
Fuenteymbro, toreando con mucha verdad y entrega, firmando excelentes
muletazos, sobre todo por el derecho, el mejor pitón del toro.
Finalizó el torero con
'manoletinas', con el pecho por delante, cerca de los pitones, resultando
volteado de forma impresionante, volando literalmente y buscado en el suelo por
el animal. Rodó el torero por el albero, librándose de milagro del percance. Se
levantó sin mirarse finalizando con desplantes ante el delirio del público.
Mató de una gran estocada, volcándose sobre el morrillo, tirando al toro patas
arriba. Locura en los tendidos y dos orejas y rabo para un enorme y bravo
Alberto Lamelas.
Hubiera cortado orejas
de su segundo, un toro de Fuenteymbro que presentó muchas dificultades, probón
y reservón, queriendo coger al torero en cada muletazo. Entrega y mucha verdad
en todo lo que hizo. Estocada entera, tardando el toro en caer, se le pidió la
oreja que incomprensiblemente el palco no concedió, cuando antes había dado orejas
con menos mérito.
Manuel Jesús 'El Cid'
no pudo lucirse. Lidió los dos toros de Fermín Bohórquez. El primero, si no lo
hubieran traído no hubiera pasado nada. Chico, sin presencia y de escaso juego,
por muy flojo. Quedó inédito el torero, que ni pudo lucirse con el capote, ni
tampoco con la muleta, en la que ha sido la faena más corta que hemos visto
últimamente.
Con el cuarto, otro
toro flojo de Bohórquez que fue muy protestado en los primeros tercios,
llegando a la muleta con un escaso viaje y menos posibilidades. Cierto es, tuvo
nobleza el animal lo que aprovechó 'El Cid' para cuajar una labor que fue
creciendo, alcanzando las mayores cuotas de lucimiento al final, consiguiendo
redondos sobre el pitón derecho, resultando limpios y templados, cambiando los
pitos del principio por fuertes ovaciones. Mató de una estocada entera y bajita
cortando dos orejas, la segunda algo benévola.
Una oreja de cada uno
de sus toros con el hierro de 'El Pilar' cortó Cayetano Rivera Ordóñez. Ninguno
de sus dos oponentes fueron un dechado de virtudes, más bien al contrario,
flojo y noble su primero y desabrido su segundo. Con ambos anduvo entregado y
voluntarioso en dos trasteos en los que destacó por su temple y poco ajuste.
Mejor con su primero,
que, aunque fue muy soso, anduvo relajado. Con su segundo sufrió muchos
enganchones desluciendo mucho su labor. Se arrimó en la parte final de sus
trasteos y como mató de forma rápida, cortó dos orejas asegurando también la
Puerta Grande junto a sus compañeros.
Desde estos medios de
comunicación, agradecer a nuestro grandioso amigo Ángel del Arco la información
recibida sobre este festejo, pudiéndoles traer a ustedes información veraz de
todo lo ocurrido tanto en Andújar como en Villanueva del Arzobispo.
Esta semana estaremos
en Villacarrillo y Cazorla, que ya junto a Úbeda y Jaén serán las ferias que
pongan fin a este año tan activo taurinamente en nuestra provincia.