Leo la crónica de Darío Calacha en la web Pureza y
Emoción sobre la Corrida de Toros celebrada en La Malagueta el pasado Sábado de
Gloria en este enlace: http://decatafalcoyoro.blogspot.com.es/2015/04/donde-esta-la-autoridad.html
Decepcionado como en tantas ocasiones aunque no por
ello sorprendido, solo me viene a la memoria las palabras en el programa
semanal “Plaza de Toros” de mi amigo y maestro Agustín Hervás en Onda Cero
Marbella, de un Presidente que tuvo la Malagueta durante dos décadas, D. José
Luís Fernández Torres.
Hace ya unos años que gracias a Blogs como el del
referido Agustín Hervás, Pepe Pastor o Daniel Rojo e inclusive el del propio
señor Fernández Torres, tengo conocimiento de su concepto, tanto de aficionado
como desde el punto de vista de Autoridad, que a fin de cuentas, tengo muy
claro que siendo un buen aficionado, se es a la vez respetuosa Autoridad para
con la Fiesta, el Toro y el Aficionado, estos dos últimos, base de la primera. Siempre
me han llamado la atención presidentes como el propio Fernández Torres en La
Malagueta, Pedro Naranjo en Ciudad Real, César Hidalgo en Teruel; y como no, mi
grandísimo amigo Juan Lamarca, quien fuera presidente de la Plaza de Toros más
importante del mundo, Las Ventas de Madrid. Si no estoy en el error, todos
fueron destituidos o han dejado el cargo ¡Qué casualidad!
Me quedo con toda la argumentación que el señor
Fernández ha desarrollado en la entrevista, pero quiero sobresaltar lo
referente a: La Fiesta está sin futuro, aunque la ilusión la tenga intacta o la
frase “Los Presidentes no pueden hacer nada porque los echan a la calle, pues
que te echen, lo que no puedes hacer es
admitir el fraude porque te vayan a echar”. Tú no ganas dinero por estar ahí,
tú haces eso porque crees que debes hacerlo defendiendo la integridad del
espectáculo.
Y yo pregunto: ¿Para qué sirven esos cursos si
quienes están designados a perseguirlo e incluso imparten cursos, siguen admitiendo el fraude? eso
resulta aberrante y vergonzoso.
Dice el señor Fernández: Los Presidentes han olvidado que
la Ley de Potestad Administrativa de Asuntos Taurinos habla fundamentalmente de
la integridad del espectáculo y vamos a ver si se la hacemos ver a los
delegados y, los delegados a su vez se lo trasmitan a los Presidentes para que
no se admita el fraude como una cuestión, algo ya que……. como todo esto es
normal…….., pues para que vamos a hacer nada.
Ojalá consiga lo que dice, ya que seremos un gran
número de aficionados los beneficiados de los Cursos de Formación, ya que
tendremos el garante de disfrutar de corridas, si, arreglo al peso exigido en
estas plazas de 3ª categoría -algo dicho sea de paso, culpable de que muchos
encastes no se puedan lidiar- pero no por ello exentas de su trapío y sobre
todo su INTEGRIDAD; aunque ya le
adelanto a don José Luis; que a los aficionados al menos, no creemos en “Mesías”.
Comenta del mismo modo: El Presidente debe defender los
derechos de los espectadores, que si uno va ir a ser Presidente y no va a
ejercer su labor porque lo vayan a quitar, que es muy triste.
Yo diría que es algo más que triste, pero obviaré el
calificativo. En ninguna Plaza de Toros de la provincia de Jaén en la que he
asistido para informar del festejo, se cumple el artículo 37, punto 6 del
reglamento en cuanto estipula lo correspondiente a la exposición de las actas
al menos en los accesos a la Plaza de Toros, un “PANFLETO” con el orden de lidia es a veces la única nota expuesta
al espectador.
Tampoco se lleva a efecto lo estipulado en cuanto a
que el sorteo debe hacerse PÚBLICO;
siempre es efectuado en dependencias de la Plaza donde solo los “privilegiados”
tienen acceso.
Ya en una ocasión oí decir al señor Fernández: “Si las imposiciones violentan el
concepto que tienes del toreo, vete”. Pero en realidad ¿Cuántos se van? ¿Cuántos abandonan
la poltrona? ¿O es que a ningún Presidente le imponen condiciones?
También comenta el señor Fernández algo en lo que
estoy totalmente de acuerdo: “El problema que hay es que
lamentablemente, hay poca afición hoy día entre la gente -con las excepciones
que confirman la regla- que se dedica a hacer esto, tanto presidente como
delegado”.
Designar personas con afición sería muy fácil, pero
además les exigiría que se pusieran delante de un “eralito” al menos para que
entendieran bien de qué va esto de los toros; cualquier persona con dos dedos
de frente sabe que la práctica hace mucho más que un buen estudio sobre un
libro. Con esta prueba aprobada con buena nota, muchos actuarían de forma muy
diferente.
Aquí estaremos esperando algún cambio ya que la
Fiesta está ubicada en Cultura y como declaré a un medio de comunicación, la
misma está sobrada de tanto estado policial como político -y no me refiero a los Palcos- por eso ahora mismo
viene bien aquello de que “Y al guarda, quien lo guarda” o aquello otro de “A
donde está la autoridad”, sobre la cual D. Juan Lamarca dijo: “ni está ni se le
espera”, lo mismo que D. José Luis Fernández
“no ve el futuro de la Fiesta”.
interesante reseña que desagraciadamente pasara desapercibida por la mayoría de los aficionados, y que decir de la prensan esperar nunca una reseña como esta, con lo que no tengo menos que felicitarle, y al mismo tiempo dar mi opinión sobre la problemática actual de el toreo bajo mi punto de vista, últimamente aparte de estar politizada como nunca avía estado y monopolizada como nunca, con lo que todo el clan unidos solo podrán ser vencidos, por el aficionado cuando digan hasta aquí hemos llegado, lo demás ya lo sabemos empresarios corruptos y defraudadores, anunciando fusiones falsas y desmintiéndolas a las tres semanas, matadores agrupados para que no entren quien ellos no quieran, y con los becerros debajo de el brazo como los que se muestra en la foto.
ResponderEliminarAsí es amigo, yo creo que usted también lo ha dejado claro. Por eso, ha llegado el punto que ya no creemos ni en la autoridad ni en nadie, solo creo en la buena fe de las personas, si, pero ¿sirve de algo?. Un saludo amigo.
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