CON PADILLA
REGRESO EL CICLÓN, FANDIÑO MUY EN TORERO Y LUQUE POCO A POCO.
Arles (Francia),
Aforo: más de media plaza.
Tres toreros distintos,
tres faenas diferentes ante unos Torrestrella de variadas hechuras, serios con cuajo,
y de variado juego en general. Nobles
aunque justos de fuerzas el que mas el que menos se dejo hacer, a excepción del
complicado segundo al que Fandiño supo manejar, y el parado sexto un precioso
jabonero bien hecho y serio falto de desplazamiento y entrega. Comienza la corrida con 7 minutos de retraso en el
coliseo Galo de Arles, a lo que el público responde con pitos y palmas.
Sale el primero
de la tarde, serio, cuajado y bien armado, con cosas muy buenas en los primeros
tercios, Iván Fandiño le hizo un ceñidísimo quite por Gaoneras al que respondió
Juan José Padilla por tafalleras, a punto estuvo el Jerezano de ser arroyado
cuando remató el quite con una larga de rodillas, al comenzar la faena el toro
se daño su mano izquierda, al darse cuenta Padilla de esto agilizo la muerte
del animal, recibió una merecida ovación.
En el cuarto
Padilla se desquito, tapando bocas en los mentideros taurinos donde se dice que
solo se le dan corridas blandas para que no se exponga, hubo algún mal llamado
aficionado que dijo que su faena era una vil charlotada, señores míos, Juan José
Padilla es un torero de pies a cabeza, un ejemplo de fuerza y de lucha, y ante
todo de una gran calidad humana, y como dice Emilio Muñoz y Moles, al que nunca
se le escucho quejarse de nada, en su segundo un Torrestrella algo basto de
hechuras, noblón y manejable, le cuajó un buen tercio de banderillas destacando
en un inmenso par ejecutado de dentro a fuera, realizó una faena inteligente, con
entrega y mucha o mejor dicho toda la disposición, templando y ligando
muletazos, al final de la faena se desato el "ciclón" con sus
molinetes de rodillas, su pase de pecho rodilla en tierra, y su desplante
arrogante llevando al público al fervor, tras una buena estocada le corto Juan
José los dos apéndices del astado, consiguiendo así la salida por la puerta
grande.
Después del
quite en el primero de Padilla, ya se anunciaba un torero, cuajó una muy
meritoria faena a un complicado toro que no entró nunca a la muleta y llevó la
cara siempre a media altura. El vizcaíno en un gran esfuerzo, valor, actitud,
compromiso y firmeza se impuso al toro en una labor en la que se la jugó con
mucha verdad torera. Fallo con el acero privándolo de trofeo. En el quinto, un
noblote que mostró sus buenas condiciones nada más pisar la arena, lo meció con
el capote el de Orduña, espectacular la media de remate, luego lo dosificó en
el último tercio pudiéndolo y sometiendo su embestida por abajo, templando y
mandando, profundos muletazos al natural, un toreo despacio, largo y ajustado. Firme
y seguro entro a matar en una gran estocada y mientras el toro tragaba la
muerte sonó un aviso que a mi parecer innecesario pues en breves momentos
rodaría el quinto. Ante una gran faena de dos orejas sin lugar a dudas solo se
concedió una, a pesar de tantos años viendo toros hay cosas que aun se escapan
a mi comprensión.
El joven Luque
entendió bien al tercero, un noble con calidad al que le faltaron las fuerzas, pronto
lo entendió y lo manejo suave y con temple, el sevillano se gusto por pitón
derecho, llevándolo con gusto, con elegancia como ya nos mostró en fallas, certero
con la espada le corto una oreja al de Torrestrella. En el sexto, poco o nada
que hacer, el de Gerena le echó esfuerzo ante este "negao", sin tener
ningún lucimiento. Silencio.
Desde el corazón, Conchi Mateo.
Desde el corazón, Conchi Mateo.
Magnifica crónica José la comparto plenamente es lo que vi y opino. Un saludo
ResponderEliminarMagnifica crónica José la comparto plenamente es lo que vi y opino. Un saludo
ResponderEliminarGracias Juan, como ves es de mi estupenda colaboradora en el Blog, Conchi Mateo, una gradisima aficionada y como ves, entendiendo de toros, tener amigos asi da gusto. Un saludo Juan
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