Tras la finalización del Homenaje a D. Antonio
Barranco y Tertulia con el maestro linarense Curro Díaz; los buenos amigos nos
dimos cita en la Taberna La Esencia, ubicada en la misma Plaza de Toros junto a
la peña de Paco Moreno; un lugar de ambiente exquisito y unas tapas que como
suele decirse, no solo quitan el hambre sino que “quitan el hipo” aderezadas
además por la simpatía de su gerencia.
Como dice un conocido refrán, poquitos pero bien
avenidos, componentes del mundo de la política, cantaores de la ciudad, toreros
de plata y grandioso aficionados estuvimos pasando una post-velada taurina de
lo más acogedora y cordial, algo que resulta difícil narrar.
Unos buenos caldos de Jerez, una estupenda cerveza a
su justa temperatura acompañada de unas tapas de lo más variopintas y delicadas
al paladar expuestas sobre pizarra de “Puerto Laca”, tierra ganadera por
excelencia dentro de la zona denominada “El Condado de Jaén”, dieron paso a
escuchar a cantaores de la talla de “Toli de Linares” con esas Campanas de
Linares que pusieron los bellos de punta, Ramón Beltrán “El Esquilaor” con un
cante de lo más “jondo” y puro que pueda escucharse; pero por si todo esto
fuera poco, los geniales Enrique Soto y Joselete de Linares pusieron las notas
que culminaron la fantástica velada vivida anoche en Linares.
Gracias a todos amigos, verdaderamente en Linares
siempre tendré una de las cosas más grandes que puede tener una persona, la
sincera amistad de unos buenos amigos, todos ellos artistas, como artística es
la Ciudad de Linares.